Sanitaria admite que agua puede tener mal sabor y lanza inédita campaña para fomentar su consumo en Antofagasta
por El Mercurio
La sanitaria Aguas Antofagasta decidió hacerse cargo de un tema que parece arraigado en los clientes de la empresa: que el agua potable tiene mal sabor. Y para eso lanzó una campaña con afiches en el mall de la ciudad, donde una rodaja de limón cae a un vaso con el líquido. “Puede no gustarte, pero es sana (…) Si deseas, enfríala o saborízala con rodajas de limón o naranja”, se lee más abajo.
La idea es fomentar el consumo del recurso, que en su mayoría es captado desde el mar y desalinizado en una planta desde 2003. Ésta abastece al 65% de sus 400 mil habitantes, y el resto llega de aducciones cordilleranas en Toconce, a 300 km.
La campaña abrió una polémica en la ciudad, sobre todo en las redes sociales, ante lo que se consideró como un reconocimiento de la sanitaria respecto del mal sabor del agua.
Esta situación llega a tal punto que muchos en Antofagasta prefieren beber agua embotellada, una costumbre heredada desde hace décadas, cuando el agua tenía arsénico.
“Soy antofagastina y nunca he tomado agua directamente de la llave, porque es casi una tradición familiar a pesar de que es mucho mejor que antes. Prefiero el agua embotellada, aunque el té, por ejemplo, sí lo tomo con agua de la llave, pero hervida”, dice la estudiante Andrea Leiva (26), sorprendida con el afiche.
Salvador Silva, gerente de sustentabilidad de la sanitaria, explica que la idea de la campaña es “llamar la atención acerca de que el sabor del agua es perfectamente opinable, pero lo importante es que entregamos agua sana e invitamos a consumirla”.
La promoción fue diseñada por trabajadores de Aguas Antofagasta, que tomaron como modelo una iniciativa de Las Vegas (EE.UU.), donde la captación en el desierto implica un importante tratamiento del agua y también se le cuestiona su sabor.
“Es lamentable que personas de escasos recursos gasten importantes sumas mes a mes en agua embotellada, en la creencia de que el agua de la llave pudiera no ser beneficiosa para la salud. Es un completo error, nuestra agua es un producto sano”, afirma Silva.