Forestarán zona norponiente del Parque Metropolitano con 100 mil árboles nativos
Se plantarán especies como quillayes, maitenes y peumos.
Por Darío Zambra, La Tercera.
Si se miran los cerros del Parque Metropolitano desde el centro y la zona oriente, es posible apreciar un espacio imponente, con distintas tonalidades de verde. Pero cuando se observa desde las comunas del sector norte y poniente de Santiago, el cerro toma otro color, uno parecido al marrón. ¿Por qué sucede eso? Debido a que las laderas norponiente de los cerros San Cristóbal, Los Gemelos, Chacarillas y El Carbón tienen mucha menos vegetación que las laderas suroriente.
“Ahí quedan muchas zonas sin forestar. Fue durante años una especie de patio trasero”, asegura el director del Parque Metropolitano, Mauricio Fabry.
Pero en los próximos tres años, este sector comenzará a cambiar su cara, gracias al plan de forestación más grande del parque en 30 años. Se trata de un proyecto para plantar 100 mil árboles en tres años, entre 2012 y 2014. Abarca una superficie de 146 hectáreas, que equivalen a un quinto del total del parque, que tiene 722 hectáreas
Deuda histórica
Algunos de estos árboles se plantarán en lugares que hoy no tienen vegetación y el resto se utilizará para densificar otras áreas. La mayoría se ubicará en el sector norponiente, en una extensión de 11 kilómetros, que va desde el Parque de la Infancia hasta el cerro El Carbón, en Huechuraba.
“Con esto repararemos una deuda histórica y les daremos una nueva oferta a los vecinos de Huechuraba, Recoleta y Conchalí, comunas a las que el parque les daba la espalda”, sostiene Fabry.
Para esta zona se escogieron especies nativas que consumen poca agua y que tienen una alta resistencia al sol, como quillayes, peumos, maitenes y algarrobos. Además de su aporte paisajístico, estos árboles ayudarán a contener la erosión en estas laderas y a capturar CO2.
Durante el segundo semestre de este año se preparará el terreno y se instalarán los sistemas de riego. La idea es comenzar a plantar los árboles en el otoño de 2013, después de la primera lluvia.
Tras este plan, el Parque Metropolitano quedará completamente cubierto de vegetación, salvo las zonas que no lo permiten, como las pedregosas. Se concluye así la labor que comenzó en 1917, cuando el San Cristóbal era un gran sitio eriazo. El último gran programa de forestación se desarrolló en los años 90.