Carta de la semana: “Una muerte anunciada”
El pasado miércoles 28 de agosto, en un juicio unánime, la Tercera Sala de la Corte Suprema paralizó la construcción de la central termoeléctrica Castilla, proyectada en Bahía Salado, en la Región de Atacama. La decisión se tomó porque la Corte determinó que la Evaluación de Impacto Ambiental era “ilegal”, ya que las empresas controladoras, MPX y E.ON, presentaron por separado los estudios del complejo termoeléctrico, compuesto por la Central y el Puerto Castilla.
En la carta destacada de la semana, publicada en el diario El Mercurio y enviada por Álex Godoy, docente e investigador de la Facultad de Ingeniería de la Universidad del Desarrollo, se abordan las grietas que mantiene el país en políticas públicas de materia energética y la falta de incursión en nuevas formas de energías renovables. Además, destaca el rol que tuvo la ciudadanía en la decisión adoptada por la justicia.
Después del corte, podrás leer la carta completa enviada por Álex Godoy al diario El Mercurio.
Señor Director:
El fallo sobre Castilla no es más que el síntoma de nuestra carencia de una política pública en temas energéticos ligados a temas ambientales y económicos. La Corte Suprema se ha pronunciado, en donde el mensaje ha sido claro: el proyecto debe ser evaluado en su conjunto y no por partes como la ley lo permitía. Esto es como si usted debiera regularizar una ampliación de su casa presentando ésta en partes, como si fueran proyectos en casas independientes.
Sin embargo, esto va más allá. La envergadura de Castilla es el reflejo de nuestra visión de solucionar nuestros problemas con grandes soluciones, que al final traen grandes problemas, siendo el ejemplo empírico el puerto de Ventanas y su contaminación.
Segundo, Castilla es el reflejo de los pocos incentivos para la introducción de energías renovables en términos de competitividad con otras fuentes y su diversidad.
Tercero, es el reflejo de la necesidad de interconectar sistemas con tal de aumentar las eficiencias de todos. Cuarto, Castilla es el reflejo de la falta de una planificación a largo plazo entre una planificación territorial efectiva ligada a condiciones locales y sistemas productivos.
Quinto, Castilla es el reflejo del atraso de la entrada en vigencia de la nueva institucionalidad, por discusiones muchas veces sin sentido en materias técnicas. Sexto, es el reflejo de que ambas coaliciones no han sido proactivas en la búsqueda de soluciones en términos políticos.
Séptimo, Castilla es reflejo de que la ciudadanía sí está interesada en temas ambientales y que éstos ya no son un adorno lingüístico.
¿Era posible esperar otro resultado?
Álex Godoy
Facultad de Ingeniería Universidad del Desarrollo