Gobernación negocia con privados para la operación del nuevo aeródromo de Chiloé
Por Pamela Gutiérrez, El Mercurio.
Dueños de predios contiguos exigen compensación:
Árboles que sobrepasan la altura para el aterrizaje de los vuelos comerciales deben ser cortados este mes.
Óscar Bahamonde, uno de los propietarios de terrenos que colindan con el aeródromo de Mocopulli (Chiloé), pide $10 millones para cortar los árboles cuya altura impedirían la operación del nuevo terminal aéreo.
El gobernador de Chiloé, César Zambrano, debe convencerlo a él y a otro propietario de que lo hagan este mes. De lo contrario, peligra la marcha blanca del aeródromo en octubre.
Bahamonde sostuvo a “El Mercurio” que no se opone al corte, pero que el precio de la tala es de $10 millones, que deberían ser pagados por la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC). Este propietario también exige la compra de 15 hectáreas de su predio por parte del Estado, “porque ahora no lo puedo vender, ni tampoco puedo construir”. Pide $15 millones por hectárea. Exequiel Pérez, el otro propietario en disputa, acota que “nadie se ha acercado a conversar conmigo… tendría que pensarlo mucho para cortar los árboles”.
Consultado el ministro Golborne, quien ayer visitó las obras del terminal aéreo en Chiloé, dijo que “es un tema de la DGAC” y que “confiaba” en que este conflicto no impidiera la apertura del aeródromo. El vuelo inaugural con el Presidente Piñera está programado para octubre. Golborne destacó que el 90% de las obras se efectuaron en este gobierno, “y a él le corresponde venir a cortar la cinta”.
LAN Express anunció ayer que volará desde Santiago a Chiloé con escala en Puerto Montt cuatro veces a la semana, desde el 7 de noviembre, y que el boleto ida y vuelta costará $42.000, sin tasa de embarque.