Aumentan a 6% familias allegadas y hacinamiento registra leve baja
Por Manuel Valencia, El Mercurio
Nuevos resultados de encuesta Casen Vivienda:
Según ministro Lavín, incremento se produce por los efectos del terremoto y del auge minero en ciudades del norte.
La encuesta de Caracterización Socioeconómica (Casen) 2011 evidenció algunos leves cambios en la composición de los hogares con altos grados de hacinamiento y familias allegadas del país.
Según el Ministerio de Desarrollo Social, entre 2009 y 2011, la cantidad de familias allegadas que comparten distintas viviendas o cuartos en un mismo terreno, creció de 5,2% en 2009 a 6,6% el año pasado.
En cuanto a los grupos que comparten espacio dentro de una misma vivienda (allegamiento interno), la cifra creció levemente, de 17,1% a 17,2% en los últimos dos años.
A juicio del ministro de Desarrollo Social, Joaquín Lavín, este cambio responde a los efectos del terremoto. “El allegamiento externo se produce por el terremoto y tiene que ver con un hogar que se instala dentro de otro y comparten una vivienda por razones económicas y por razones transitorias, mientras esperan el subsidio y la construcción de viviendas”, asevera.
El terremoto también explica -según Lavín- el incremento en el déficit habitacional en 74.717 viviendas.
El análisis de la encuesta Casen también revela por qué las familias optan por compartir espacio con otras. El 76,5% declara que lo hace por razones económicas. Un 4,6% decide vivir con otros grupos para cuidar enfermos, niños, ancianos o personas con discapacidad. Un 4,5% dice que elige esa opción por comodidad, 4,3% lo hace por costumbre o tradición familiar.
Las cifras también mostraron un cambio positivo pero leve en los grados de hacinamiento. Según los antecedentes de Desarrollo Social, el porcentaje de hacinamiento crítico (con cinco y más personas por dormitorio) bajó de 2,1% en 2009 a 1,1% en 2011. El hacinamiento medio (entre 2,5 y 4,9 personas en un cuarto) también cayó, de 9,4% a 9,1%.
Según Lavín, “se pasó de 100 mil a 50 mil hogares hacinados”.
En el desglose regional, la zona con mayor concentración de personas por metro cuadrado fue Tarapacá, con 13,0% de hacinamiento medio y 2,1% de nivel crítico. Según Lavín, esto responde a las migraciones que se producen a esta zona por ofertas de trabajo vinculadas a la industria minera.
Vivienda: cifras muestran baja del déficit
Para el ministro de Vivienda, Rodrigo Pérez, el aumento del déficit habitacional en 74.717 viviendas, “no necesariamente debe leerse como una mala noticia, porque muestra dinamismo en la reducción del déficit. Después del terremoto, el déficit era de 527 mil viviendas. Si en esta Casen, se estima que tenemos una falta de 495 mil viviendas, entonces se logró reducir el déficit en 32 mil”, explica.
Pérez asegura que el 93% del déficit que evidencia la encuesta Casen corresponde a las cinco regiones afectadas por la tragedia.
A juicio del ministro, además del terremoto, el déficit se explica por el crecimiento vegetativo de la población. “Al año, se estima que 100 mil viviendas se requieren para atender el déficit habitacional. De esas 100 mil, 59 mil son de interés social; es decir, deben ser cubiertas por el Ministerio de Vivienda a través de los distintos programas”.
Según Pérez, la gran reducción del déficit habitacional se produjo en los años 90 e inicios de la década pasada. “Luego, el ritmo del proceso se enlenteció para caer a 0,6 entre 2006 y 2009”, afirma.