Vivienda concesionará mantención de calles a privados para evitar la aparición de hoyos
Por Manuel Valencia, El Mercurio.
Mecanismo permitirá medir deterioro de las vías para ejecutar planes preventivos:
Sistema operará con empresas que revisarán en terreno el deterioro de los pavimentos. Vecinos podrán pedir reparación de vías en los municipios, y los Serviu priorizarán los proyectos.
Los hoyos en las calles son hoy prácticamente tierra de nadie. A la hora de repararlos, no existe claridad en cuanto a quién es el responsable de taparlos. Así, subsisten por meses e incluso años y, a la hora de buscar soluciones, entre los Servicios de Vivienda y Urbanización (Serviu), los municipios y las intendencias se atribuyen unos a otros las responsabilidades.
Este caos, que no permite contar con una institucionalidad para tapar hoyos, podría terminar pronto. A partir del próximo año, los serviu de cada región serán los responsables de concesionar la mantención de calles a privados, que deberán hacer un seguimiento técnico de las vías para evitar la aparición de baches.
“Los hoyos son el síntoma terminal de un pavimento. Una vez que aparecen, literalmente hay que botar las calles a la basura y volver a pavimentarlas. Lo que se busca es detectar daños antes de la formación del hoyo y mantener preventivamente la calle. Así, en el mediano plazo, queremos que no se produzcan hoyos”, afirma el director de proyectos de ciudad del Minvu, Fernando Colchero.
Para definir el mecanismo, la cartera contrató un estudio de la U. Católica -financiado con un Fondo de Fomento Científico y Tecnológico (Fondef)- que recomienda el mecanismo.
“Este proyecto busca crear un plan de mantención para que los privados revisen los pavimentos y así, cada seis meses, entreguen un plan de mantención de las calles”, señala el ministro de Vivienda, Rodrigo Pérez.
El modelo, que cuenta con un presupuesto inicial de $30 mil millones, partirá en 2013.
En concreto, permitirá que empresas especializadas “ausculten” las primeras grietas que se forman en las capas de asfalto u hormigón. Luego tendrán un sistema de seguimiento para detectar si crecen o persisten.
El subsecretario de Vivienda, Juan Carlos Jobet, explica que la situación actual “es un pésimo negocio para el Estado, pues el costo de reparar tardíamente es aproximadamente seis veces superior al costo de realizar una mantención preventiva. Este acuerdo permite atender las necesidades de conservación de pavimentos en forma oportuna, genera un enorme ahorro para el Estado y un mejor nivel de servicio para los usuarios”.
Con este sistema, los vecinos podrán reclamar a los municipios la reparación de las fracturas y cráteres del pavimento. Estos, luego, presentarán al Serviu cada requerimiento para su resolución.
Paralelamente, el Gobierno Regional asignará los recursos mediante una “transferencia consolidada”. Esta figura evitará la burocracia actual, que transfiere recursos por cada proyecto, y ante cualquier cambio requiere una aprobación de Contraloría, con lo cual el proceso se dilata cuatro meses. Con este modelo, podría tardar la mitad del tiempo.
Lanzan programa para la reparación de veredas
A partir de este trimestre, el “Programa de pavimentos participativos”, que desde 1996 permite urbanizar calles de tierra y mejorar vías deterioradas en barrios, incluirá la reparación de veredas.
El beneficio permitirá subsidiar entre 75% y 90% del costo de reparación de las aceras, que serán postuladas por los municipios en un sistema concursable. El resto será aportado por las comunas y el ahorro de los vecinos.
“Este plan recoge un gran anhelo de vecinos. Mejorará sustantivamente el tránsito peatonal, consolidará barrios, mejorará la calidad de vida y completará la atención del espacio público en cuanto a pavimentación de calzadas y aceras”, afirma el ministro de Vivienda, Rodrigo Pérez.
La ampliación del programa de pavimentación también beneficiará a pasajes ubicados en barrios de viviendas sociales.
Origen del daño
Las lluvias son uno de los principales agentes de deterioro del pavimento, porque, según el Serviu, generan quiebres y el origen de las grietas en las capas de asfalto y hormigón.
El sol constante al que se exponen las calles de asfalto origina su deformación. Eso explica que algunas vías presenten ondulaciones y desniveles.
Los aceites que desprenden los vehículos son agentes corrosivos que erosionan los pavimentos de asfalto. Así, pueden iniciar orificios que crecen y se transforman en baches.
Los vehículos pesados , como camiones y buses, someten al pavimento a una presión que termina por generar grietas y destrucción de sus capas.