Carta de la semana: “Plan para demoler blocks”
El martes de esta semana, el Presidente Sebastián Piñera lanzó el programa “Segunda Oportunidad”, orientado a restaurar o demoler los blocks sociales de cuatro regiones del país, que estén en un estado crítico. El plan, coordinado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (MINVU), determinó que en marzo de 2013 se iniciarán las primeras demoliciones, lo que permitirá que las personas accedan a nuevas viviendas de hasta 57 m {2}.
En la carta destacada de esta semana, enviada al diario La Tercera, Francisco Domínguez, Director del Área Blocks de Techo Chile, aborda los efectos de las políticas habitacionales implementadas durante los ’80 y ’90, y que hasta el día de hoy son latentes en distintas regiones del país. Según Domínguez, estos efectos no se relacionan únicamente con problemas habitacionales, sino que abarcan también el cómo se planifican y diseñan nuestras ciudades.
A continuación encontrarás la carta completa.
Señor director:
Las familias que viven en blocks de viviendas sociales fueron engañadas con el sueño de la casa propia. En los años 80 y 90 se les prometió algo que dista mucho de ser una solución digna.
Celebramos el anuncio del gobierno que pretende demoler 4.000 blocks en cuatro años, aunque sean sólo el 2% del total de blocks que hay en Chile. Como primer gesto es un gran avance. Pero el tema no debe acabar ahí, pues son muchas las variables involucradas en una buena política de vivienda y urbanismo. La situación en que viven miles de familias se debe a una política pública mal pensada y pésimamente ejecutada, que expulsó a los más pobres a la periferia, generando segregación. El diseño de las viviendas, la ubicación y la falta de servicios -privados y públicos- creó pocos incentivos y posibilidades para salir adelante.
El problema, entonces, también es urbanístico. Además de una mejora en la calidad de las viviendas, las familias anhelan vivir en lugares donde Carabineros realice patrullajes, donde haya acceso a internet, cultura y entretención, supermercados, farmacias y servicios que den plusvalía a los barrios. Se deben generar incentivos para que las empresas consideren rentables estos lugares y dar recursos a los municipios de manera que puedan mantener los equipamientos y las áreas verdes.
Nos alegramos con el anuncio del gobierno, pero colocamos una voz de alarma: si los subsidios no van acompañados de un Estado dispuesto a invertir, planificar y regular la ciudad, esta segunda oportunidad estará lejos de ser una solución definitiva.
Francisco Domínguez
Dir. Área Blocks Techo-Chile