Plantas Solares Pueden Competir con las de Energías Fósiles
Acera llama al Gobierno a impulsar proyecto 20/20.
Gremio que agrupa a los principales productores de ERNC sostiene que una fotovoltaica puede vender su producción en US$105 Mw hora.
Las energías renovables no convencionales (ERNC), y en particular la solar fotovoltaica, actualmente registrarían menores costos que las denominadas convencionales. Este fue uno de los mensajes centrales con los que Alfredo Solar, presidente de la Asociación de Energías Renovables (Acera), abrió la jornada del primer Foro-Expo Wind & Solar Power 2012, evento que congrega a las empresas más importantes en el ámbito de la generación eólica y solar para discutir sobre las formas de impulsar el desarrollo de este tipo de energías en Chile.
Para el presidente de Acera el argumento de la falta de competitividad de estas energías en relación a sus costos es hoy sólo un mito. “Las pocas licitaciones de ERNC han demostrado que estas tecnologías son perfectamente competitivas con los precios del diésel, del gas e incluso del carbón. Hoy podemos decir, por ejemplo, que la energía solar fotovoltaica puede vender su producción en torno a US$100 o US$105 por Mw hora en un contrato a 20 años con una minera”.
Solar indicó que el obstáculo más importante para el desarrollo de energías como la eólica y la solar es de carácter financiero. “Cada proyecto de inversión requiere de un banco que lo financie en el largo plazo, y para eso se requiere una estabilidad en el ingreso”. En este sentido, planteó la necesidad de generar un marco regulatorio que aborde el problema de la intermitencia natural de estas fuentes de generación. Tal modelo determinaría que “estas energías se despachen a los sistemas interconectados no con una contraparte de contrato, sino que vía regulación se acceda a un nivel de precios estabilizado”.
Este problema se reflejaría especialmente en los contratos de suministro con mineras, “ya que fuentes que entregan energía de forma continua y gestionable pueden negociar con mayor tranquilidad un contrato a largo plazo, pero fuentes que son intermitentes ven una dificultad al intentar negociar con clientes que tienen un tipo de consumo diferente a la forma de producción de la energía”.