Vivienda incorporará a agencias para gestionar nuevo subsidio de arriendo
Por Manuel Valencia, El Mercurio.
Instrumento debutará con primer llamado en 2013:
Beneficio será entregado a quienes busquen propiedades bien localizadas, certificadas por empresas. Proyecto pretende crear un incentivo a la promoción social de los grupos vulnerables.
Un estudio que realiza la Universidad Católica sobre el mercado del arriendo en Chile muestra una evidencia clara: la localización es fundamental para que las familias vulnerables alcancen mejores oportunidades para superar situaciones de carencia económica. El análisis compara a familias propietarias que viven preferentemente en zonas periféricas con las que alquilan viviendas en sectores mejor localizados. Entre ambas, las últimas tenían mejores opciones de empleo y lograban perspectivas más auspiciosas para superar su situación de vulnerabilidad.
Estas premisas coinciden con las que maneja el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, en el diseño de un nuevo subsidio de arriendo.
El beneficio, que debutará el próximo año, busca que el Estado subvencione en torno al 60% del costo de arriendo de las viviendas. De esa forma, copaga un alquiler para fomentar instancias de promoción social para familias del primer quintil (con ingresos per cápita de hasta $53.184).
Además, fomenta la movilidad laboral de familias del segundo quintil (hasta $90.067), con ingresos informales, que son susceptibles de un cambio de barrio o de ciudad por mejores opciones de empleo.
También apunta a grupos como adultos mayores, para quienes no es prioritario obtener la propiedad de una vivienda.
Para gestionar el beneficio, se estudia crear agencias que tendrán como misión clasificar las casas y departamentos aptos para ser arrendados. En la conformación de ese stock de viviendas, las agencias tendrán como criterios la superficie, materialidad y buena localización.
La figura de la agencia se basa en el modelo norteamericano de las PHA (siglas en inglés de “agencias de vivienda pública”), que conoció el ministro Rodrigo Pérez en su visita a Estados Unidos, en abril pasado.
El monto de la subvención aún está siendo definido por los técnicos del Ministerio de Vivienda. Lo que sí se determinó es que sea un financiamiento transitorio, que no desincentive a las familias para convertirse en propietarias en el mediano plazo. Con ese fin, se diseña una “política de egreso”, que premiará a quienes mantengan al día su pago de arriendo, a la hora de evaluar la adjudicación de un subsidio habitacional.
Otra novedad del programa es que podrá beneficiar a extranjeros, como los que ocupan cités o casas precarias de Santiago o en zonas como Alto Hospicio o Antofagasta.
El sociólogo y académico del Instituto de Estudios Urbanos de la UC, Francisco Sabatini, sostiene que un subsidio de arriendo puede facilitar a quienes viven en situaciones irregulares, acceder a una vivienda con mejor localización: “Con las crisis económicas y la precariedad del empleo, las personas privilegian una mejor localización. También para los propietarios de viviendas, da una oportunidad para cambiar a una mejor ubicación. Con un subsidio, el mercado de arriendo se vuelve más dinámico”.
$150 mil es el monto tope del subsidio de arriendo que el Gobierno aplica para las familias damnificadas, que vivían en los campamentos levantados tras el terremoto y tsunami .
2 años es el plazo máximo de duración que tendrá el subsidio de arriendo para familias trasladadas de blocks, en el nuevo programa “Segunda oportunidad”. El mismo plazo se podría replicar en el subsidio de arriendo que se lanzará el próximo año.
PHA es la sigla con la que comúnmente se conoce a las “Public Housing Agencies” (agencias de vivienda pública), las entidades que gestionan el subsidio de arriendo en Estados Unidos. Ese modelo, que conoció el ministro Pérez en su visita a Estados Unidos, es el que se busca replicar en Chile, con ajustes a la realidad local.
Los otros usos del beneficio: campamentos y blocks
Antes de iniciar la aplicación del nuevo subsidio de arriendo, el Ministerio de Vivienda ya probó la medida en los campamentos de damnificados del terremoto. Más de mil familias han accedido al beneficio de hasta $150 mil, lo que logró reducir los grupos familiares en las denominadas “aldeas”. Según estimaciones del Minvu, más del 52% ha optado por el beneficio, lo que permitió levantar viviendas de emergencia.
El beneficio también será aplicado en el nuevo programa de “Recuperación de blocks : segunda oportunidad”, que recientemente lanzó el Gobierno para demoler y refaccionar departamentos Serviu en estado crítico. En esos casos, el subsidio servirá para trasladar y dar vivienda por dos años a familias arrendatarias y allegadas mientras se construyen nuevas viviendas, a las cuales podrán postular mediante los programas habitacionales regulares del Minvu.