Nuevo subsidio permitirá construir viviendas sociales y de clase media en un mismo edificio

Por MANUEL VALENCIA, El Mercurio

Programa de Integración Social será lanzado en los próximos días:

Plan busca fomentar barrios con familias de distintos estratos socioeconómicos y así generar más oportunidades para grupos vulnerables. Primer llamado beneficiará a 2.000 postulantes.

Romper el círculo vicioso que actualmente genera la construcción de viviendas sociales en la periferia de las ciudades es el objetivo que busca alcanzar un nuevo plan que impulsará el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), a partir de este mes. Se trata de los denominados Proyectos de Integración Social (PIS), que buscan permitir la construcción de viviendas sociales y de clase media juntas en un mismo edificio habitacional o dentro de un solo condominio.

¿Cómo se consigue este propósito? La modalidad unirá, en un mismo concurso, a postulantes de los subsidios Fondo Solidario (DS-49) y el de clase media (DS-01). La idea es que se integren en un plan habitacional único de hasta 300 viviendas. Estos complejos habitacionales tendrán un límite máximo de 40% de propiedades para grupos vulnerables y hasta 60% de viviendas para clase media o sobre las 2.000 UF. Para lograr esta integración, el Minvu beneficiará con 100 UF más a cada familia de clase media que opte por participar en un plan de este tipo y entregará un incentivo a las constructoras para levantar viviendas de alto estándar, o las que propongan en un mismo proyecto diversas tipologías de casas o departamentos, pero con un diseño homogéneo para evitar que se genere diferenciación entre las familias.

Según explica el jefe de la División de Política Habitacional del Minvu, Francisco Irarrázaval, la iniciativa apunta a que las familias vulnerables “logren una mejor integración, porque la ciudad hoy es un bien público al que no acceden todos. Con estos proyectos, se simplifican procesos, las empresas tienen incentivos para apostar por ellos y las familias acceder a viviendas mejor ubicadas, y así aumentan sus posibilidades de salir de situaciones de vulnerabilidad”.

Mejor ubicación

El primer llamado que se inicia en los próximos días se prolonga hasta el 28 de diciembre y demandará una inversión superior a los US$ 18 millones. En ese proceso se busca probar el sistema y, luego, generar concursos anuales. A juicio de Irarrázaval, es probable que las constructoras que ya desarrollan proyectos de clase media en comunas “pericéntricas” como San Joaquín, San Miguel o incluso la zona sur de Santiago se interesen por desarrollar los primeros edificios o condominios de este tipo. “Actualmente los terrenos baratos están en la periferia y eso representa un incentivo perverso para las constructoras que concentran los proyectos de vivienda social en zonas como Renca, Cerro Navia, Lo Espejo, La Granja, San Ramón o La Pintana. Quizá las viviendas actuales pueden ser mejores que las casas Copeva, pero se ubican en zonas con mal acceso, y eso quita oportunidades a las familias. Esta medida viene a revertir esta situación”, complementa.

De acuerdo con las estimaciones del Minvu, con este plan se construirán edificios con diversos “mix” de departamentos: algunos de mayor superficie, beneficiados con un subsidio de hasta 100 UF con un avalúo de hasta 2.000 UF y, en el mismo piso, podrá construirse un departamento social, que debe cumplir con la norma del subsidio DS-01 (de clase media): al menos dos dormitorios, mejores terminaciones, tina y calefón.

Si se trata de barrios, en el Minvu proyectan que se construirán casas dentro de condominios, con sistemas de seguridad y multicanchas, jardines y plazas activas.