Capitalinos en dos ruedas: los modelos de bicicletas más usados en la ciudad

Por René Paz, La Tercera.

Mientras las BMX sirven para un traslado más dinámico, las plegables permiten subirse al Metro.

Como todos los días a las 8 de la mañana, Wladimir Labraña se prepara para ir a trabajar sobre dos ruedas. Pero no anda en cualquiera, sino en una fixie, un modelo parecido a una pistera, que es parte de los más apetecidos por los colores llamativos. “Es de una sola pieza y se frena con los pedales (hacia atrás). Además, tiene piñón fijo, y eso quiere decir que no se puede dejar de pedalear, si no, se detiene”, explica.

Labraña es parte de un grupo denominado “ciclistas vehiculares”, que además de ser devotos de este modelo, prefieren transitar por las calles y no por ciclovías, para que los automovilistas no los consideren como un vehículo menor. “La bicicleta es un medio de transporte más, y uno tiene los mismos derechos y deberes que quienes conducen una moto”, dice.

Además de este modelo, son varios más los que circulan por las calles de Santiago, pues para persona y propósito hay una bicicleta. Según Víctor Romo, productor de Bicicultura, “todo depende de la personalidad y necesidad del usuario. Están las que sirven para ir de la casa al trabajo y las que proporcionan mayor adrenalina, como la BMX”.

Estas llegaron a Chile a mediados de los 80. Vladimir Kraudy, quien es ciclista profesional desde hace nueve años, las usa para transportarse pero también para hacer piruetas. “Como las BMX son más pequeñas y livianas, permiten hacer saltos y moverse más rápido por diferentes lugares de Santiago”, asegura.

La moda de las plegables

Gran aceptación entre los ejecutivos de entre 25 y 35 años tienen las bicicletas plegables. Son de pequeño formato (1.2 metros de alto), tienen ruedas de aro 16 (las convencionales son aro 26) y se pueden doblar para guardarlas en un bolso.

“Son ideales para cuando tengo que tomar el Metro para ir a otras reuniones fuera de mi oficina. Sólo la doblo”, dice Francisco Apparcel, ingeniero comercial, quien todas las mañanas viaja desde su casa en Luis Carrera con Escrivá de Balaguer hasta su lugar de trabajo, en El Golf. “Hace un mes -que es cuando la empecé a usar- que me ahorro la mitad de tiempo en este trayecto”, dice.

La sicóloga Estefanía Buré usa su bicicleta de paseo para ir desde Padre Hurtado con Av. Bilbao -donde vive- hasta Escuela Militar, zona en la que está su trabajo. Aunque no es una de las más livianas (pesa 18 kilos), la escogió para utilizarla en el bandejón central de Av. Américo Vespucio. “Lo que me importa es que me permita llevar una carga en un canasto o alforjas. Prefiero tomarme tiempo, levantarme más temprano y aprovechar de distraerme de camino al trabajo”, dice.

Los modelos de paseo son los más utilizados por las mujeres. “Tenemos patrones de viaje, horarios y necesidades diferentes a las de los hombres. En general, las mujeres privilegian la seguridad al realizar sus desplazamientos”, asegura Sofía López, miembro Macleta.cl, institución femenina creada en 2006.

Aunque existe gran variedad de bicicletas, según Víctor Romo, ninguna de estas es las más apta para transportarse por Santiago. “Las pisteras permiten rápida circulación pero no están hechas para la superficie irregular de Santiago”, asegura. La que mejor se adapta a las calles de la ciudad, según Romo, es una híbrida con cuerpo de mountainbike, de 6 a 7 cambios, que tiene mayor amortiguación y ruedas lisas.