Fallas en comunicación y prevención reveló sismo 6,7°

Por Rodrigo Álvarez y Matías Rovano, El Mercurio.

Hubo críticas, pese a la reacción de los organismos de emergencia:

Región de Atacama volvió ayer a la normalidad tras la reposición de servicios básicos. También se realizó el despeje de caminos y de rutas secundarias.

Problemas con la comunicación telefónica, corte en el suministro eléctrico a más de 16 mil clientes, diversas poblaciones con cortes de agua potable en Copiapó y Tierra Amarilla, y daños leves en varios inmuebles fueron los efectos del sismo de 6,7° Richter que la tarde del miércoles sacudió a la Región de Atacama.

Crisis de pánico entre la población -incluso una mujer falleció por un infarto y un hombre sufrió un ataque vascular- obligaron a reforzar la Urgencia del hospital regional.

En sectores costeros, pese a que no hubo alerta de tsunami, los turistas se autoevacuaron de las playas a modo preventivo.

Y aunque el director de la Onemi de Atacama, Mauricio Maturana, se mostró “satisfecho” con el funcionamiento de los organismos de emergencia tras el sismo, hubo críticas.

El superintendente de Bomberos de Copiapó, Mario Bordoli, cuestionó la falta de “cultura sísmica” entre la población y simulacros para educar. “A excepción de unos pocos, el resto no está preparado (…) con cultura sísmica como en Japón”, dijo.

El alcalde de Copiapó, Maglio Cicardini, criticó los problemas con la telefonía celular y fija. Todo lo demás “funcionó como se esperaba”, añadió.

Su par de Vallenar, Cristián Tapia, también se quejó de los problemas en la comunicación. “Si las empresas no mejoran sus sistemas ante estas eventualidades, debemos a través del Gobierno conseguir un par de teléfonos satelitales. Porque es un poco desesperante estar en la incertidumbre, sin saber lo que está pasando en los sectores rurales”, dijo el edil.

Los organismos de emergencia concluyeron que las coordinaciones tras el movimiento se realizaron de forma muy rápida. El gobernador de Copiapó, Eduardo Estefan, aseguró que “todo se puede mejorar, pero aprendimos la lección que nos dio el 27-F”.

“Si bien fueron 16 mil las personas que quedaron sin luz, se volvió en un tiempo más que razonable, porque esperábamos tener luz a las 15 horas (de ayer) y las 10 de la mañana estaba todo repuesto. Lo mismo pasó con el agua potable”, añadió Maturana.

El intendente Rafael Prohens reconoció ayer que “la Onemi ya me había alertado antes de que algo podría suceder al sur de Atacama”. Eso, según Maturana, porque “teníamos una frecuencia mayor de movimientos cerca de la localidad de La Higuera, en el límite entre la Tercera y la Cuarta Región”.

La región volvió ayer a la normalidad luego de la reposición de los servicios de electricidad y agua potable, aunque se registraron problemas de presión. Vialidad continuará hasta hoy despejando los rodados en 22 km de la ruta entre Vallenar y Alto del Carmen.