China lanza plan de gasto en infraestructura por US$ 19.000 millones
El monto se destinará a construir y mejorar carreteras, canales y muelles.
Por Diario Financiero
El gobierno chino aumentó sus esfuerzos para impulsar el crecimiento de la segunda mayor economía mundial anunciando un nuevo plan de estímulo.
El Ministerio de Finanzas chino detalló un nuevo plan de inversión en infraestructura pública por 120.000 millones de yuanes (US$ 19.254 millones), que se enfocará en construir y mejorar carreteras y conexiones de la zona urbana y rural del país asiático, informó la agencia de noticias estatal Xinhua.
El plan contempla que se destinen 70.000 millones de yuanes a proyectos como carreteras, canales y muelles aseguró la agencia de noticias, mientras que 50.000 millones de yuanes se enfocarán en mejorar carreteras secundarias de la zona rural.
La inversión va en línea con los recientes esfuerzos de las autoridades de impulsar la infraestructura doméstica, tras aprobar un masivo plan de financiamiento en septiembre.
En ese entonces, China aprobó 60 proyectos de infraestructura -que incluían la construcción de carreteras, puertos y pistas de aterrizaje- con un gasto valorado en US$ 157.000 millones.
Asimismo, a comienzos de febrero el Ministerio de Ferrocarriles anunció que aumentará en 30% su inversión en vías férreas este año, a 650 mil millones de yuanes, publicó la agencia Xinhua, citando al titular de la cartera, Sheng Guangzu.
Esfuerzos del gobierno
En las últimas semanas el gobierno chino ha realizado una serie de anuncios que pretenden reforzar el crecimiento económico de la nación asiática.
En 2012 el Producto Interno Bruto se expandió 7,8%, su ritmo de crecimiento más bajo desde 1999, y muy por debajo de las cifras de dos dígitos que marcaron la década anterior.
La semana pasada, las autoridades dieron a conocer un plan de reforma tributaria para sacar de la pobreza a 80 millones de personas y reducir la desigualdad. Entre otras medidas, el proyecto contempla subir el salario mínimo y cobrar más impuestos a las empresas estatales. Los dineros extra que se recauden gracias al alza tributaria se redistribuirán en gasto social.
El objetivo del gobierno es reorientar la fuente de crecimiento del país hacia el consumo interno en lugar del comercio exterior, para reducir su dependencia de los vaivenes económicos de las otras potenciales mundiales, como Estados Unidos y Europa, y sacar provecho a un mercado de 1.300 millones de personas.