Informe de gobierno estima que Sipco operará en las próximas ocho semanas
Considerando actual escenario de precios, se gastarían unos US$ 15 millones en subsidios.
Por Carlos Alonso, La Tercera
Finalmente, las bencinas subirán hoy $ 3,7 promedio por litro, según la Empresa Nacional de Petróleo (Enap). Y tal como adelantó el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, el Sistema de Protección al Contribuyente del Impuesto Específico de los Combustibles (Sipco) amortiguó el alza, inicialmente prevista en $ 18, rebajando el impuesto específico de 6 a 5,6 UTM.
Con esto, en las últimas cuatro semanas se acumuló un alza de $ 52 promedio y en lo que va del año, de $ 83. En la Región Metropolitana las bencinas llegarán a niveles máximos: la de 93 octanos se cotizará a $ 805; la de 95, $ 832, y la de 97, a $ 862.
Para que operara el sistema, el gobierno modificó algunos parámetros. Según lo publicado ayer por el Diario Oficial, se aumentó de 19 a 39 semanas el valor promedio histórico usado del petróleo WTI. Además se mantuvieron en seis meses los precios tomados en cuenta de los futuros del petróleo. Y se redujo de 51 a 47 semanas el valor promedio histórico del diferencial de refinación de la gasolina y el WTI.
De mantenerse estas condiciones internacionales, el informe de la Comisión Nacional de Energía (CNE) proyectó que el Sipco se mantendrá operativo durante las próximas ocho semanas, es decir, hasta el 18 de abril de 2013 (ver infografía).
El costo fiscal por el funcionamiento del Sipco llegará a los US$ 2,2 millones sólo esta semana y desde su inicio, acumula cerca de US$ 125 millones. A ello se suma un costo adicional de US$ 15 millones si se mantiene vigente hasta abril.
Cuestionamientos
Pese a la entrada en vigencia del Sipco, parlamentarios y expertos insistieron en reestudiar el sistema. Sin embargo, el secretario de Estado señaló que “el Sipco es completamente transparente, pero permite un cierto grado de arbitrio de la autoridad, ya que no es un sistema con piloto automático”.
Otro de los puntos en que hay coincidencias es en avanzar a un impuesto equitativo entre las bencinas que pagan 6 UTM y el diésel, gravado con 1,5 UTM. Sobre esto, Larraín ya ha descartado modificaciones.
La economista jefe de Econsult, Michelle Labbé, afirmó que se debe abrir la discusión en cuanto al nivel del impuesto específico, pero aclaró que “no en época de elecciones, ya que es un tema popular”. Para la economista, el tema “debe ser estudiado técnicamente, porque repercute no sólo en el bolsillo de los consumidores y en la inflación, también en los ingresos fiscales”.
Francisco Klapp, de Libertad y Desarrollo (LyD), explicó que todos los estudios que ha realizado el Banco Mundial apuntan a que “el impuesto al diésel que se paga en el país debería acercarse a los niveles de la bencina, porque no hay razón para que sean diferenciados”.
Los diputados concordaron en que apenas se retome el período legislativo, en marzo, la Comisión de Hacienda de la Cámara comenzará a estudiar el tema del Sipco. Carlos Montes (PS) dijo que “la oposición propuso que se aplique una misma tasa a los combustibles, generando algún tipo de subsidio para el transporte público, lo que permitiría reducir la tasa impositiva y mantener la recaudación”.
Ernesto Silva (UDI) acotó que “se evaluará el funcionamiento del Sipco y se recopilará información de cuándo y cómo empezará a operar el sistema de seguros. Y luego ver posibles cambios, como reducir el ancho de banda con que opera el sistema”. De todas formas, dijo que la UDI prefiere un impuesto específico más bajo, “en niveles de 4,5 UTM”.
