El primer sistema de alerta temprana de crecidas de los ríos será implementado en el Loa
Por Mario Alejandro Rojas, El Mercurio
Para prevenir estragos por lluvias del “invierno altiplánico”:
El primer sistema de alerta temprana de crecidas de los ríos será implementado en el Loa
Red de sirenas beneficiará a 127 mil personas, serán instaladas desde marzo y, tras ser evaluadas por el MOP, se extenderán a otros cauces del país.
Un tramo de 45 kilómetros del río Loa, casi el 10% de su longitud total, entre 2 mil 300 y 3 mil metros de altitud, que comprende Calama y los pueblos de Chiuchiu y Lasana, en la precordillera de la Región de Antofagasta (II). Ese será el emplazamiento del “Sistema de Alerta Temprana de Crecidas de Ríos”, iniciativa inédita en Chile que impulsa el Ministerio de Obras Públicas.
La zona, en los últimos dos veranos, ha sufrido la inundación de poblaciones, además de cortes de caminos y puentes, por lluvias asociadas al “invierno altiplánico”.
Las precipitaciones han generado un caudal de hasta 103 m {+3} /seg, según registros de la Dirección General de Aguas (DGA), mientras que el promedio habitual del Loa fluctúa entre 1,5 y 1,7 m {+3} /seg.
La red de alerta contará con cuatro sirenas, similares a las que se usan para advertir sobre un eventual maremoto en el litoral. Cada una puede detectar una crecida hasta una distancia de 1,2 kilómetros.
Dos de ellas serán emplazadas en el radio urbano de Calama, en Yalquincha y en la Villa San Rafael, contigua al Parque El Loa. Las dos restantes, a 33 km y 45 km al noreste de Calama, en terrenos de la comunidad de Chiuchiu y en el poblado de Lasana, respectivamente.
Sensores satelitales
Loreto Silva, ministra de Obras Públicas, explica que “las sirenas estarán vinculadas a sensores satelitales de la DGA, en que se registrará cantidad e intensidad (del torrente)”.
“Esto permitirá generar alertas y nos dará hasta siete horas para adoptar medidas (evacuaciones y cierre de tramos peligrosos) ante inundaciones y aluviones”, añade.
La secretaria de Estado explica que la iniciativa beneficiará a 127 mil personas.
“La instalación comenzará en marzo y estará operativa desde julio de este año. La gran prueba será en la próxima estación de lluvias estivales, realizaremos evaluaciones y a partir de ello definiremos si vamos a ir avanzando en otras cuencas del país”, anuncia Silva.
Segunda fase
El programa -señala Obras Públicas- también considera un trabajo conjunto con la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), que coordinará una campaña educativa con los integrantes de juntas de vecinos, comunidades indígenas -etnia atacameña-, escuelas y otras organizaciones comunitarias de las zonas involucradas.
“La idea es generar en las comunidades una cultura preventiva y reactiva. Elaboraremos un plan de manejo de riesgo, similar al que se ha hecho en bordes costeros ante maremotos, por ejemplo, con vías de evacuación”, dice Mario León, director de la Onemi de Antofagasta.
La implementación de la red demandará una inversión de $152 millones, los que serán financiados por el Ministerio de Obras Públicas y las empresas mineras que operan en la Segunda Región.