Abrirán segundo frente de faena en ruta que permitirá unir Tierra del Fuego y Navarino
El camino será concluido en cinco años y no en diez, como estaba previsto. Se trata de una labor clave para la conectividad del territorio nacional.
Por Rolando Martínes, El Mercurio
Desde 1995 a la fecha, el Cuerpo Militar del Trabajo (CMT) ha construido 79 de los 140 km de la ruta que abre en la zona sur de la isla Tierra del Fuego. El objetivo es llegar al canal Beagle (bahía Yendegaia) y conectar desde allí, vía marítima, con la isla Navarino, todo por territorio chileno.
La titánica labor supone un promedio de 4,3 km al año surcando un camino que implica mover miles de toneladas de tierra y roca en medio de condiciones extremas. Por lo mismo, se estimaba que completar los 61 km restantes tardaría casi una década, pero ahora ese tiempo se reducirá a la mitad.
El segundo semestre de este año, el CMT instalará un segundo campamento de trabajo en la zona de Caleta 2 de Mayo, en la bahía Yendegaia, desde donde iniciará un nuevo frente de trabajos, esta vez desde el sur, para encontrarse en unos cinco años con el grupo que avanza desde el norte, y que hoy concentra sus faenas en la zona del lago Fagnano.
Para lograr este propósito, el Ministerio de Obras Públicas (MOP) y el CMT acordaron un nuevo contrato -o convenio de faenas- para iniciar las obras desde el sur. Solo resta la aprobación administrativa del nuevo pacto, por un monto global de $18 mil millones.
De dicha suma, se adelantarán $4 mil millones que permitirán al CMT instalar el segundo campamento base, incorporar más maquinarias e iniciar la ejecución de los trabajos. Estas instalaciones podrán albergar a unas 80 personas, pero se prevé que en una primera etapa laborarán allí 60 efectivos.
“Esta obra no tendría sentido si no logramos generar toda la conectividad a Puerto Williams. Esa es la aspiración que ha tenido siempre Chile (…) Mientras no tengamos conectado por rutas terrestres a todo el territorio nunca daremos la igualdad de oportunidades que nuestros compatriotas se merecen”, afirma el subsecretario de Obras Públicas, Lucas Palacios, quien la semana pasada viajó hasta la zona para ratificar el nuevo convenio de faenas.
“Solo para avanzar en un tramo de 600 metros para llegar al río Betbeber, será necesario remover 40 mil metros cúbicos de roca”, explica el jefe zonal del CMT, coronel Fernando Hinrichs. Hoy los trabajos están acercándose a este afluente, unos 7 km al sur del lago Fagnano, donde desemboca el río Azopardo.
El oficial agrega que actualmente hay 70 personas -militares y civiles- que trabajan en turnos de día y noche para llegar al río Betbeber antes del invierno.
“Hay que cruzar un sector rocoso. Es un poco lento el avance; hay que hacer cortes sobre 10 metros y eso requiere un cuidado especial de trabajo”, agrega.
Hinrichs afirma que ya planifican cómo emprenderán el inicio del segundo frente, desde Yendegaia hacia el interior. “Se pretende iniciar las obras y primeros movimientos en el segundo semestre”, advierte, considerando que para instalar el campamento base habrá que tramitar permisos ambientales y colocar sistemas de electricidad, tratamiento de aguas y toda la logística necesaria para las oficinas y habitaciones de quienes abrirán la ruta desde el sur.
Palacios admite la compleja geografía de la zona, así como las condiciones en que trabajan el personal en el área. “Ellos deberán abrir el camino cruzando la cordillera Darwin, y eso resulta difícil. Habrá que cruzar la cordillera en una situación de soledad absoluta”, afirma.