Diez claves para comprender y superar la última década más seca en 70 años en Chile
Por Marco Gutiérrez V., El Mercurio.
Este año se prevé que los bajos niveles de agua se mantendrán:
Deficiencias en infraestructura, gestión de cuencas e institucionalidad son los grandes temas que figuran entre los aspectos que debaten los expertos. Si bien el déficit de precipitaciones es la principal causa de la sequía en Chile, hay otros problemas relevantes que asoman al analizar el sistema hídrico local.
Expertos coinciden en que se debe potenciar la figura de la Dirección General de Aguas
Fortalecer la capacidad de acción de la Dirección General de Aguas (DGA) es una de las materias en las que coinciden los expertos consultados.
Juan Eduardo Saldivia, ex subsecretario de OO.PP. y actual socio del estudio Saldivia, Contreras, Inalaf, Wurth y Verdugo Abogados, comentó que solo la DGA de Mendoza, en Argentina, es más grande que su símil en nuestro país. Indicó que ello trae como beneficio para quien quiera tener otorgado un derecho de agua en esa provincia, contar con ese documento en 15 días. En nuestro país -dijo- es un trámite que no demora menos de tres años.
El profesor de Ingeniería Hidráulica de la UC, Bonifacio Fernández, sostuvo que la organización de la disponibilidad de los recursos debe estar centrada en la DGA. El académico de la UC manifestó que los ministerios de Minería, Agricultura y Energía son usuarios del agua, y no es positivo que en ellos esté radicada la administración de la oferta del recurso a nivel país.
El ex DGA Rodrigo Weisner advirtió que el MOP debe tener las riendas del sistema hídrico, y no el Ministerio de Medio Ambiente, por ejemplo. Planteó impulsar una Subsecretaría de Recursos Hídricos bajo el paraguas de Obras Públicas.
Susana Jiménez, de LyD, dijo que se debe mejorar el sistema de información del sector. La titular del MOP, Loreto Silva, recordó que por años la DGA entregó derechos de aprovechamiento de agua que pudieron dañar la sustentabilidad por sobreotorgamiento. “Un tema particularmente relevante es avanzar hacia criterios de sustentabilidad”.
Mejorar la gestión del recurso en las cuencas
En cuanto a la gestión de cuencas, en el sector comentan que se producen disputas entre rubros como el agrícola (mayor consumidor de agua en el país ) y el minero, que tiene más poder económico y podría acumular más derechos de agua.
El profesor de Ingeniería Hidráulica de la UC, Bonifacio Fernández, indicó que la forma adecuada de gestionar el agua es a través de comités de usuarios. Dijo que en el norte y en zonas como el Maule existen problemas entre los consumidores. Añadió que si continúa el deterioro de los acuíferos en la zona central, las disputas entre usuarios llegarán a Santiago.
Juan Eduardo Saldivia destacó que el manejo adecuado de los recursos es relevante. Comentó que el buen funcionamiento del sistema de suministro del agua potable para consumo humano en Santiago, no permite que la comunidad, e incluso las autoridades, tengan conciencia de la crisis hídrica en el resto del país.
Susana Jiménez dijo que se debe avanzar en materias de gestión -y otras- para reducir la conflictividad de usuarios. Afirmó que hay que asignar el agua a usos de más rentabilidad social.
Proponen crear ventanillas únicas para inversiones
También en materia de institucionalidad, expertos proponen crear una ventanilla única para tramitación de proyectos de energía e hídricos. Ello, porque actualmente los proponentes deben obtener muchos vistos buenos de organismos estatales para poder llevar adelante sus inversiones.
Lo anterior, cobra mayor relevancia en materia de generación hidroeléctrica. Chile cuenta con un potencial hídrico a desarrollar por más de nueve mil MW, tanto a través de represas como en centrales de pasada.
Rodrigo Weisner comentó que hoy quien aspire a construir una central hidroeléctrica, por ejemplo, debe acudir a la DGA para regularizar los derechos de aprovechamiento de agua; también debe someterse a los organismos de Medio Ambiente, para ajustarse a las normas ambientales; tiene que mantener contacto con el municipio del lugar de la obra, y con la Superintendencia de Electricidad y Combustibles, entre varias entidades estatales.
“Es necesario crear ventanillas únicas”, dijo Weisner. Ello, agregó, no para ser más blandos con los permisos, pero sí para evitar superposiciones institucionales y facilitar inversiones.
Déficit de precipitaciones es el problema base de la sequía en el país
Los casi cuatro años de déficit de precipitaciones constituyen el problema base de las dificultades hídricas que enfrentan el país y diferentes sectores productivos como la agricultura, por el riego, mientras otros deben optar por fuentes de energía caras, debido a la escasez de hidroelectricidad.
Las cifras de la Dirección Meteorológica de Chile son elocuentes y muestran que a la fecha hay fuertes mermas en lluvias entre las regiones Cuarta y Novena respecto de una temporada normal.
En ese marco, las ciudades de La Serena y Calama muestran déficit del 100% en precipitaciones. En tanto, en la zona central, Santiago tiene una disminución promedio de 73% en lluvias mientras que en Curicó es de 79%, en Chillán la carencia es de 62% y en Temuco es de 42%.
La ciudad de Valparaíso, en tanto, tiene un déficit de 34%.
El sistema de embalses, asimismo, registró en marzo pasado una baja de 57,8% respecto del promedio histórico para dicho mes.
A la vez, las aguas subterráneas están mostrando importantes descensos y se obtienen a mucha mayor profundidad. Copiapó -cuenca que registra actividad agrícola y minera- tiene varios pozos que han quedado secos, según un reciente reporte de la Dirección General de Aguas (DGA).
La mala calidad del agua de los pozos en la V Región está, incluso, afectando el consumo humano.
Según explicó el jefe de Climatología y Meteorología Aplicada de la Dirección Meteorológica de Chile, Jorge Carrasco, estamos en el cuarto año de déficit en lluvias -especialmente en la zona central-, lo que permite señalar a esta última década como la más seca en 70 años.
Carrasco sostuvo también que “esa situación es delicada”.
Y señaló que existen áreas en la zona sur (ver mapa) que aparecen como “extremadamente secas”, según su comportamiento en precipitaciones.
Reactivan embalses, pero en el norte no hay agua para ellos
El ex director general de Aguas y actual socio del estudio de abogados Puga Ortiz, Rodrigo Weisner, comentó que en la década de los 70 y 80 no se construyeron embalses en Chile, y que aún no se logra recuperar ese déficit.
La ministra de Obras Públicas, Loreto Silva, recordó que la Estrategia Nacional de Recursos Hídricos que elaboraron considera elevar en 30% la capacidad de embalsamiento hacia la próxima década.
A la vez, en la cartera recordaron que están impulsando la construcción de cuatro represas por un total de US$ 760 millones. Se trata de Punilla (Biobío), Chironta (Arica y Parinacota), Valle Hermoso (Región de Coquimbo) y Chacrillas (Valparaíso). También indicaron que se terminó de levantar los embalses Ancoa y El Bato.
La economista senior de Libertad y Desarrollo, Susana Jiménez, dijo que es “valioso” concretar los embalses que prevé el MOP. Pero Weisner sostuvo que la construcción de embalses no es la gran panacea, ya que si en el norte no existe agua para llenarlos, esta solución no sirve.
Canales en tierra pierden hasta 60% de sus caudales
En la zona central existen problemas con los canales, ya que no son todo lo extenso que deberían, y al estar construidos en tierra se puede perder entre el 40% y el 60% de los recursos.
Rodrigo Weisner planteó que los canales deben ser revestidos para evitar filtraciones.
A la vez, señaló que existe un déficit en la mantención de los canales que existen. Por ejemplo, señaló que en varios casos el agua se estanca debido a que hay acumulación de malezas.
Lo anterior -añadió- no solo podría generar problemas de suciedad desde el entorno a las aguas -generalmente para riego-, sino que también afecta los caudales.
Esto, porque al estancarse el flujo, se produce un efecto de evaporación con mayor rapidez, lo que podría significar pérdidas de hasta el 20% del agua.
La desalinización como solución y sus altos costos de producción
Los proyectos de desalación han sido señalados por diversas autoridades en los últimos años como una de las alternativas para enfrentar la escasez de agua en el norte del país. Ello, tanto para consumo humano como para las actividades productivas del sector minero.
Una partidaria de esta forma de producción de agua es Susana Jiménez de LyD.
“La experiencia internacional demuestra que el acceso al agua no se relaciona necesariamente con su disponibilidad en forma de agua dulce, sino con la capacidad que desarrollan los países para acceder a ella por diversas formas, lo que se asocia a su nivel de desarrollo”. Recordó el caso de Singapur, que no disponiendo de agua dulce, ha impulsado proyectos como las desaladoras.
Pero una traba es el alto costo de producción de éstas. Un metro cúbico de agua desalinizada a orilla de mar costaría US$ 1,5, valor que sube si hay que llevarlo a un centro minero. El costo de potabilizar agua dulce es de US$ 0,25 por m {+3} , dijo Rodrigo Weisner.
MOP invierte y espera estudio del Banco Mundial
El MOP ha sido una de las entidades a nivel estatal que mayor preocupación ha mostrado en relación con la sequía.
A la fecha, la inversión realizada por esta cartera en sistema de Agua Potable Rural es de $22.310 millones y para sistemas de riego es de $12.226 millones.
Dentro de las medidas legales y regulatorias que ha tomado está mejorar la legislación en lo que respecta a aumentar las multas por robos de agua y la regularización de derechos. En enero de 2012 ingresó al Congreso dos proyectos de ley que abordan estas materias.
A la vez, a fines de junio de este año recibirá un estudio del Banco Mundial que generará un detalle de las reformas a ser implementadas en este sector. Por ejemplo, en cuanto a institucionalidad se presentaron tres alternativas: una superintendencia, una subsecretaría y una agencia.
En 2011, el Banco Mundial ya había realizado un diagnóstico crítico del sistema chileno.
Infiltración de pozos como estrategia
La infiltración de pozos es una de las alternativas que también es destacada por los expertos para enfrentar y superar los problemas de déficit hídrico en el país y aprovechar los caudales que se pierden en el mar.
Para Juan Eduardo Saldivia esta es una de las materias relevantes que se debe impulsar, además de analizar la factibilidad de llevar agua desde zonas de abundancia del recurso hasta otras deficitarias como el norte.
Loreto Silva, titular del Ministerio de Obras Públicas, dijo que en el contexto del diseño de su Estrategia Nacional de Recursos Hídricos también tiene contemplada la infiltración de pozos.
A mediados de 2012 esa cartera informó que había elegido al Valle del Aconcagua para iniciar la infiltración de acuíferos. Se trataba de dos piscinas que tenían un costo por cerca de $700 millones.
Se necesitan dos a tres años lluviosos para recuperar nivel de los embalses
El jefe de Climatología y Meteorología Aplicada de la Dirección Meteorológica de Chile, Jorge Carrasco, comentó que para los próximos meses de este año el pronóstico es que se mantenga el déficit de precipitaciones.
“No es que no se registren eventos de lluvia, pero el nivel acumulado será menor al de un año normal”, sostuvo el especialista.
También proyectó un futuro complejo para el corto y mediano plazo. “Es difícil decir que pasará en los próximos años. Sí se puede especular qué si se cumple un cuarto año consecutivo con déficit de precipitación, la recuperación de los embalses requerirá de dos a tres años con años lluviosos, o sea, con un superávit importante de precipitación”.