Municipios justifican con ordenanzas la instalación de pantallas luminosas
Por Manuel Valencia y Nadia Cabello, El Mercurio.
Norma del Ministerio de Vivienda las prohíbe desde 2006:
Las Condes, Ñuñoa y Maipú restringen la instalación de estos letreros.
No hay una estadística clara. Hasta 2011 se contaban más de 45 pantallas luminosas en las calles del Gran Santiago, concentradas en 15 focos de alta concentración publicitaria. Pese a la normativa actual -que prohíbe su instalación, salvo que el plan regulador lo permita expresamente-, siguen proliferando. En ocho de los municipios que concentran este tipo de publicidad, los alcaldes han optado por mantenerlas o restringirlas. Otros, como Santiago, argumentan que las permiten, pues la normativa del Ministerio de Vivienda (Minvu) solo las restringe para zonas exclusivamente residenciales y en la comuna todos los sectores se han definido como mixtos.
Uno de los municipios que prohíbe las pantallas es Las Condes. La ordenanza de 2003 dividió las comunas en tres sectores: aquellos donde la publicidad se permite, otros donde está semirrestringida y en los barrios residenciales, donde está prohibida. En ninguno pueden funcionar pantallas. El alcalde Francisco de la Maza explica que el municipio trabaja en la actualización de la ordenanza “que va a tener los mismos resguardos. Las empresas de publicidad nos han dicho que, como hay más tecnología, podríamos incluirlas, pero vamos a ver si es que hay lugares donde no tengan impacto en los vecinos”.
En Maipú, pese a que hoy existen dos pantallas en la esquina de Pajaritos y 5 de Abril, el alcalde Christian Vittori dice que “la ordenanza las restringe para evitar un bloqueo visual del Templo Votivo”.
En algunos municipios contaron que las empresas a veces ofrecen dinero extra (que puede ir desde $50 millones hasta $200 millones) que se ingresa como aporte al municipio. Se ofrecen para ser utilizados en actividades culturales.
En La Cisterna se instaló una en plena Gran Avenida, frente al municipio. El alcalde y presidente de la Asociación Chilena de Municipalidades, Santiago Rebolledo, dice que la estructura “tiene los permisos y no molesta a los vecinos”.
Actualmente, en La Reina hay dos pantallas luminosas que, según el municipio, están ahí de forma ilegal, una de ellas la ubicada en Avenida Ossa con Príncipe de Gales. “Hemos recibido bastantes solicitudes para cambiar la publicidad convencional a LED y estamos en análisis, porque no las consideramos adecuadas. Entendemos que con el tiempo ha cambiado la tecnología, pero las calles de La Reina son chicas y los edificios no tan altos”, asegura el administrador municipal, Eduardo Riveros. En Ñuñoa, en tanto, se emitió una ordenanza en 2009 para quitar los letreros sobre los edificios de menos de cuatro pisos; sin embargo, una empresa acudió a tribunales y se ordenó derogarla.
En tanto, en Huechuraba, las direcciones de Obras y de Tránsito y Transporte Público analizan caso a caso la autorización para instalar letreros, según su emplazamiento.