Minvu aprueba ciclopaseo de 42 kilómetros a lo largo de la ribera del Mapocho
Por Valentina Pozo, La Tercera.
La obra comienza en octubre y unirá a través ciclovías y espacios peatonales ocho comunas, desde Pudahuel hasta Lo Barnechea.
Dejar el auto en casa, evitar los atochamientos y no supeditarse a las largas esperas que supone el uso del transporte público, es un anhelo de varios capitalinos. Por eso, cada día son más los ciudadanos que se suben a una bicicleta o que optan por llegar a pie a sus trabajos. Sin embargo, no cuentan con las condiciones para hacerlo cómodamente en el espacio público: por ciclorrutas anchas o por veredas que no estén constantemente interrumpidas por semáforos.
Con la reciente aprobación del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) del proyecto Mapocho 42k, el anhelo de los santiaguinos comenzará a materializarse en octubre de este año.
El plan, que fue creado en la Escuela de Arquitectura de la UC, unirá ocho comunas de Santiago, desde Pudahuel hasta Lo Barnechea, por la ribera del río Mapocho. Esto, a través de un cicloparque, un espacio que fluctúa entre los seis y los 10 metros de ancho y que cuenta con una ciclovía, un paseo peatonal y áreas verdes (ver infografía).
Las obras comenzarán en octubre de este año con la ejecución de la primera etapa, que contempla 18 kilómetros que se extienden entre la calle Luis Santos Méndez, en Cerro Navia, y el Parque Bicentenario, en Vitacura. Luego -y dentro de la primera etapa también- continuarán con obras entre el Puente La Dehesa y el Parque La Ermita, en Lo Barnechea. Estos tramos tienen fecha de entrega para marzo de 2015.
Cabe mencionar que todo el cicloparque tendrá los mismos materiales y los mismos colores sobre el pavimiento, para darle una señal de continuidad a la vía.
“Este es el proyecto de conectividad urbana más relevante que se ha hecho, pensando en la movilidad y la conectividad de los peatones y ciclistas”, asegura el seremi metropolitano de Vivienda, Juan Andrés Muñoz.
Origen del diseño
La idea de hacer un cicloparque como éste, es responsabilidad del Premio Nacional de Arquitectura, Mario Pérez de Arce, quien planteó por primera vez esta iniciativa en 1989.
Pero no fue hasta 2009 que ésta cobró valor gracias a una investigación del trazado que hizo un grupo de arquitectos de la UC. Dos años después, la arquitecta UC Sandra Iturriaga, lideró a un equipo de profesionales de esa casa de estudios para concretar el plan de 42 kilómetros, que incluye las comunas de Pudahuel, Cerro Navia, Quinta Normal, Santiago, Providencia, Las Condes, Vitacura y Lo Barnechea.
Gracias al financiamiento que el grupo de Iturriaga se adjudicó por parte de la Fundación San Carlos de Maipo, pudo realizar estudios de ingeniería y diseño. Una vez terminados, los profesionales pusieron el proyecto en manos del Minvu, el que durante estos años formó comités con expertos y autoridades municipales para evaluar su viabilidad, asunto que acaba de ser aprobado por tramos.
En marzo de 2015 deberán estar entregados los 18 primeros kilómetros. Para más tarde quedarán los 14 kilómetros -repartidos en las demás comunas y que aún están a la espera de financiamiento- que faltan para completar 32. Los 10 kilómetros restantes, que se extienden por Cerro Navia y Pudahuel, quedarán para un futuro más lejano. Esto, según explica Iturriaga, porque ahí restan aún estudios de factibilidad y los recursos correspondientes. “El tramo faltante se concretará de todas maneras, porque es fundamental para la obra total, sobre todo porque está en un área no urbana y porque el espíritu de esto es potenciar Pudahuel”, afirma.
Los trabajos
El Minvu trabaja hoy en la licitación del proyecto, la que estará disponible a partir de agosto. El ganador se encargará de ejecutar todas las obras para habilitar el cicloparque. Sin embargo, en el trayecto que pasará por Santiago, será la misma municipalidad la que se hará cargo de los trabajos. Ello, porque como existen zonas típicas en sus terrenos, acordaron con el Minvu que sus expertos guiaran las obras.
Para Muñoz, este plan es la consolidación de un proyecto con una rentabilidad urbana real. “Después de cuatro años, logramos eso y también generar algo inédito, que unirá Santiago desde el poniente hasta el oriente, con los mismos estándares de calidad”, señala el seremi de Vivienda sobre esta obra que es parte del Legado Bicentenario.
Si bien en un comienzo el gobierno definió como fecha de entrega de obras el primer semestre de 2013, el subsecretario del Minvu, Francisco Irarrázaval, explica que no existía una normativa específica que pudiera acelerar la tramitación de los permisos de construcción.
Aparte de eso, fue necesario contar con la aprobación inicial de la Contraloría General de la República, los permisos municipales de cada una de las siete comunas, afinar los diseños con la UC y estandarizar el uso de materiales y dimensiones de cada tramo para lograr una imagen uniforme en toda la ciudad.
Irarrázaval destaca que al menos 110 mil personas de los sectores aledaños se beneficiarán del Mapocho 42K. “Al tener un espacio seguro y de calidad, se atreverán a salir, a dejar el auto en casa”, agrega el subsecretario.