Recolectores de residuos reciclables visitarán periódicamente a vecinos de cuatro comunas
Esos municipios construirán centros de valorización de los materiales, para que trabajadores los traten allí.
Nadia Cabello, El Mercurio
En Santiago, cerca del 70% de los desechos domiciliarios reciclables son escogidos por recolectores de base. Son personas que hurgan en la basura afuera de las casas hasta encontrar papeles, cartones y envases, que luego venden a empresas que los reutilizan.
Su labor, silenciosa, ayuda al cuidado del medio ambiente, y por eso, fueron integrados al desarrollo de modelos de reciclaje inclusivo de cuatro comunas de la capital. Peñalolén, Quinta Normal, Recoleta y Santiago contarán desde ahora con los recolectores para el retiro de desechos domiciliarios reciclables.
Para ello, los municipios coordinarán las visitas por sectores de las comunas con los recolectores. La idea es que las familias puedan separar en sus casas aquellos desechos reciclables y los entreguen a los recolectores, quienes los llevarán a centros de valorización de estos materiales para separarlos y tratarlos. Luego de eso, se los venderán a empresas que trabajan con los residuos.
Esto no solo aumentará la posibilidad de los recolectores de acumular más materiales, sino que además aliviará a los municipios que gastan gran parte de su presupuesto en el retiro de la basura domiciliaria. El objetivo es que en los próximos tres años se reciclen ocho mil toneladas de residuos sólidos con el trabajo de los recolectores. Eso implica que las municipalidades ya no pagarán por esas toneladas a las empresas de retiro de basura.
Para que el plan funcione, “lo ideal es que tengamos terrenos habilitados para hacer el tratamiento de los residuos”, explicó la alcaldesa de Peñalolén, Carolina Leitao. En su comuna, un privado entregó un terreno en comodato en el sector de San Luis. En Recoleta se construirá un centro en El Salto con Vespucio, y en Santiago se trabaja en crear uno en el sector norponiente.
“Estamos avanzando en algo que no está en el imaginario colectivo. Es una apuesta para que en el futuro reciclar sea algo básico y obvio”, aseguró el alcalde de Recoleta, Daniel Jadue.
La iniciativa es ejecutada por la Fundación Casa de la Paz y el Movimiento Nacional de Recicladores de Chile e impulsada por el Fondo Multilateral de Inversiones del Banco Interamericano del Desarrollo (BID), privados, los municipios y el Ministerio de Medio Ambiente.
“Nos estamos sumando a esfuerzos que vienen haciendo también otras municipalidades hace años en favor del cuidado del medio ambiente”, concluyó la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá.
Ocho mil toneladas de residuos se pretende reciclar con la iniciativa en tres años.
$300 mil al mes gana, en promedio, un reciclador. El metal es lo que les deja más ingresos.
Quince mil vecinos recibirán el “puerta a puerta” de los recolectores del programa.