Fuerte Bulnes duplica visitas en último año
Este Monumento Nacional está bajo administración de una concesionaria desde 2011. El verano se proyecta auspicioso ante los 40 mil turistas que recibió durante 2012, el doble que en 2011. En primavera comienza la construcción del centro de visitantes.
Por Rolando Martínez, El Mercurio
En calma, a 62 km al sur de Punta Arenas, el Fuerte Bulnes resguarda las réplicas de las construcciones donde vivieron los primeros colonizadores chilenos de la Patagonia, quienes el 21 de septiembre de 1843 tomaron posesión del Estrecho de Magallanes.
“Vale la pena llegar acá. Es muy bonito”, dice José Delgado, quien junto a su esposa y su hija viajó al lugar desde Santiago.
Este Monumento Nacional es uno de los principales atractivos de la zona. Bienes Nacionales lo concesionó en 2010, y desde 2011 lo administra Parque Historia Patagonia – Fuerte Bulnes & Puerto del Hambre.
En el último año sus visitantes se duplicaron: recibió casi 40 mil personas en 2012, el doble respecto de 2011, de las cuales el 80% fueron turistas nacionales.
Entre junio y julio ya ha recibido dos mil visitas, acota Andrea Téllez, directora regional de Sernatur.
Esta temporada baja, añade Randall Twyman, director del parque, ha sido sorprendente. “Estamos recibiendo, en promedio, el doble de visitas que en igual período en 2012. Por eso vaticinamos un crecimiento importante para el verano”, admite.
Esto, pese a los cobros diferenciados que rigen desde septiembre de 2012. Para residentes de Magallanes la entrada es de $2 mil, para visitantes del resto del país $8 mil y para extranjeros $12 mil, mientras todos los niños pagan la mitad de las tarifas.
Eduardo Barrientos, operador turístico hace 30 años, dice que dos o tres veces a la semana lleva turistas al fuerte en el período. Un tour más atractivo para chilenos que buscan un circuito por el día cerca de Punta Arenas.
“Se podría rebajar la entrada a $5 mil. Ni siquiera se les ofrece un café de regalo. Lo positivo ahora es que al llegar a Fuerte Bulnes el visitante dispone de buena cafetería, senderos señalizados y baños”, dice.
Mateo Martinic, Premio Nacional de Historia 2000, valora como positivos los cambios. “Se está trabajando como los europeos y norteamericanos, con seriedad. Nos choca, porque nos ponen orden, disciplina y cobran, pero es así. Nada es gratis”.
Hoy en el recinto hay cuatro senderos que conducen a miradores privilegiados hacia el Estrecho de Magallanes.
El 15 de agosto, anuncia Twyman, termina la implementación de la “museografía de sitio”; es decir, la instalación de panales dentro de los pabellones con información histórica.
Además, en septiembre comenzará la construcción del Centro de Visitantes y el Museo de Sitio, que bajo el mismo techo estarán ubicados a unos 2 km del acceso al recinto y cuya inversión se estima en US$5 millones.
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17 mil
personas se registraron como residentes de Magallanes para optar a tarifa de $2 mil.
1.500
personas han participado en el programa educativo que ofrece el fuerte.
