Bencinas impactarán IPC en julio y evalúan modificaciones a parámetros del Sipco
Expertos elevaron sus proyecciones para la inflación de julio, desde un 0,2%, hasta un 0,4%.
Por Carlos Alonso, La Tercera
Un alza promedio de $ 27 por litro, la mayor desde marzo de 2011, tendrán hoy las gasolinas. Enap informó que la de 93 octanos subirá $ 29 por litro y la de 97 octanos, $ 24. Producto de este reajuste, ambas gasolinas se venderán en Santiago en $ 802 y $ 860 por litro, respectivamente. Como, además, los analistas prevén un incremento adicional de $ 15 a $ 20 para la próxima semana, los expertos comenzaron a revisar sus proyecciones para el Indice de Precios al Consumidor (IPC) de julio.
La última encuesta de operadores financieros del Banco Central proyectó una variación de la inflación de 0,2% este mes, que los economistas ajustaron hasta 0,4%, por efecto de los incrementos en las bencinas.
“Mis proyecciones apuntan a un rango entre 0,3% a 0,4%, impulsado por el alza en combustibles”, indica el académico de la Universidad de Chile Alejandro Alarcón.
Hernán Frigolett, de Aserta Consultores, afirma que “el aumento en los precios de los combustibles impulsará a que el IPC de julio sea un poco más alto. Si en la medición de julio alcanza a considerar toda el alza proyectada, el IPC puede estar entre 0,3% a 0,4%, aunque existe la probabilidad que parte del incremento se traspase para agosto”. Nathan Pincheira, de Banchile, aseveró que si bien todavía mantienen su proyección en 0,2%, sí tienen incorporado un sesgo al alza. Matías Madrid, economista jefe de banco Penta, puntualizó que la inflación del mes puede llegar a 0,3%.
Una visión distinta tiene el economista de CorpResearch, Nicolás Birkner, quien afirmó que el alza de estas dos semanas compensa la disminución que se produjo en las semanas anteriores. “No habrá una incidencia significativa”, dijo.
El Sipco
Si el gobierno no cambia los parámetros del Sistema de Protección al Contribuyente del Impuesto Específico a los Combustibles (Sipco), no se estabilizarán los precios. El mecanismo opera introduciendo un componente variable al gravamen: se reduce cuando el precio de paridad de los combustibles (valor de importación) supera el techo de una banda de valor histórico (de referencia) y a la inversa, sube cuando se ubica por debajo de dicho valor de largo plazo. La banda es de +- 10%.
Pese al alza de los combustibles, el precio de paridad promedio seguiría dentro de la banda. Por lo tanto, el Sipco considera que no corresponde evitar las alzas, incluso, en momentos en que las gasolinas llegará a un valor histórico. Entre los parámetros que hoy considera el Sipco está el precio promedio de las gasolinas las últimas 39 semanas, los valores futuros a seis meses, además de diferenciales de refinación, costos de importación e impuestos.
Fuentes de gobierno reconocieron que evalúan modificar algunos parámetros para evitar que se produzca un alza importante la próxima semana. Se quiere acercar el precio de paridad al techo del valor de referencia. Reconocen que no es fácil, porque hay una diferencia de US$ 69 por metro cúbico entre el precio de paridad (US$ 825) y el techo de la banda de referencia (US$ 894). La última vez que operó el Sipco fue el 28 de febrero, cuando amortiguó el alza de $ 18 prevista a sólo $4.