Valparaíso recuperará estanque ícono en el combate de incendios
El plan incluye rehabilitar el entorno, una zona de conservación histórica próxima a los cerros Alegre y Concepción.
Por Hernán Cisternas, El Mercurio
A menos de 300 metros de la plaza Aníbal Pinto -puerta de entrada al área de Valparaíso declarada Patrimonio de la Humanidad-, un verdadero ícono del combate de incendios permanece abandonado desde 1985. Y durante 70 años ayudó a salvar inmuebles históricos que hoy dan testimonio del pasado de la ciudad.
Se trata de un estanque de hormigón armado de 28 metros de diámetro y 5,5 metros de profundidad, emplazado en 1912 a mitad del cerro Cárcel para proporcionar agua a presión a la incipiente red de 35 grifos. El almacenamiento de cuatro millones de litros significaba tener, en el corazón de la ciudad, el equivalente a 500 camiones aljibe para enfrentar emergencias.
En una primera etapa, el estanque almacenaba agua de mar. Para evitar el daño que la salinidad provocaba en los carros bomba y en las cañerías, en 1935 el alcalde Lautaro Rosas -padre del músico Fernando Rosas- aprobó y financió la conexión del estanque a la red de la compañía de agua potable. Su vida útil terminó debido a las fracturas y filtraciones provocadas por el terremoto de 1985.Entorno
La fundación Plan Cerro, creada por un grupo de arquitectos para reactivar los espacios públicos del puerto, acaba de convocar a un concurso nacional de anteproyectos de arquitectura para la reconversión del estanque del cerro Cárcel y la revitalización de su entorno.
El concurso cuenta con cofinanciamiento del Fondo Nacional de Desarrollo de las Artes (Fondart), que este año debutó con una línea de fomento a la arquitectura.
El estanque se encuentra en un terreno municipal de 2.566 metros cuadrados, frente a lo que fue el ingreso principal de la ex cárcel, convertida hoy en centro cultural. Se trata de un sector que tiene la calificación de zona de conservación histórica, con visión directa a la arquitectura de los cerros patrimoniales Alegre, Concepción y Panteón.
Reutilización
El director regional de la Oficina Nacional de Emergencia, Guillermo de la Maza, indicó que la Onemi “ve con interés y entusiasmo que la ciudad de Valparaíso pueda recuperar en pleno centro de la ciudad un acopio de agua que fue fundamental en el pasado para atender las emergencias del casco histórico y de los cerros”.
Una consulta que Plan Cerro realizó a los vecinos respaldó la recuperación del estanque y concluyó que la reconversión del entorno será una oportunidad para el desarrollo del barrio.
Un problema histórico en el puerto
Debido a su topografía, una situación grave que afectó a Valparaíso hasta principios del siglo XX fue la disponibilidad y abastecimiento de agua para consumo humano y para incendios. Según registros de 1871, el agua potable se obtenía desde 17 quebradas de los cerros porteños y era suministrada a los domicilios por 638 aguadores que la transportaban a lomo de mula. Para incendios, se disponía de una red de pozos en lugares estratégicos, cerca del mar. A mediados de la década de 1870 una cañería de 9 km trasladó agua potable desde El Salto (Viña del Mar). Entre 1895 y 1901 se construyó el embalse Peñuelas.
