Cartas de la semana: “Deterioro de Valparaíso” y “Cerros de Valparaíso I”
Durante esta semana, dos diarios nacionales publicaron varias cartas que manifestaban el sentir ciudadano sobre el estado actual de Valparaíso. En ellas todos coinciden en que la belleza de la ciudad es innegable, pero también en que aún queda mucho por hacer para mejorar la calidad de los espacios públicos y cuidar el patrimonio de esta ciudad puerto que hace poco cumplió 10 años como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
A continuación encontrarás dos cartas. La primera fue publicada el martes 30 de julio en La Tercera, y la segunda, el miércoles 31 en El Mercurio.
Deterioro de Valparaíso
Señor director:
Soy una de las muchas personas que nos hemos percatado del deterioro que está sufriendo la mítica ciudad de Valparaíso, que poco a poco va perdiendo su tradición, convirtiéndose en una ciudad cualquiera, invadida por edificios, multitiendas y supermercados. Esto ha provocado una seguidilla de cierres de locales propios del puerto (un ejemplo es la ancestral librería Ivens).
Está claro que la modernización es una máquina que avanza con fuerza y que construye (o destruye) de manera rápida y silenciosa, pero no todo lo nuevo es bueno. Hay que aceptar que esta ciudad no es igual a Viña del Mar o Santiago. Valparaíso no necesita otro Lider u otra Cruz Verde; necesita mantener su cultura y su patrimonio, otorgando apoyo a los pequeños establecimientos y locales, insignificantes para las grandes empresas, pero significativos para los porteños.
Hace falta regularizar los trabajos que se efectúan en nuestra ciudad, tarea que debiese realizar alguien que no tenga conflicto de intereses de por medio; alguien que viva y sienta Valparaíso tal como lo sentimos quienes lo recorremos, lo aprovechamos, quienes crecemos y aprendemos de él.
María Paz de la Roza
Cerros de Valparaíso I
Señor Director:
Es triste ver cómo la belleza y el encanto único que tienen los cerros de Valparaíso son nublados, literalmente, por cúmulos de cables que cuelgan por sus calles. Volví al puerto este fin de semana después de mucho tiempo, y me quedé con una sensación de dulce y agraz.
Valparaíso es una ciudad entrañable siempre, pero estos cableados excesivos, la cantidad de excremento de perros y basura tirada al suelo hasta en los paseos más concurridos y los cientos de muros rayados no le hacen honor al título de Patrimonio Cultural de la Humanidad que ostenta el lugar. Pero tampoco honran a los miles de habitantes que no merecen ver afectada su calidad de vida por la desprolijidad de sus autoridades.
Chile se caracteriza por tener ciudades limpias, no puede ser entonces que una de las más visitadas por sus conocidos atractivos sea, precisamente, una de las más sucias y descuidadas. Ojalá se haga algo al respecto.
Angélica Errázuriz A.