Una nueva estrategia sostenible de basura para regeneración urbana

La serie “Building Tomorrow”, que transmite la cadena británica BBC, trata diversos temas sobre las soluciones tecnológicas que se han aplicado en las ciudades, la influencia que estos espacios urbanos ejercen en las personas y los desafíos ambientales que sus habitantes tendremos que enfrentar en los próximos años y que sus efectos ya están presentes en ciertos lugares del planeta.

En uno de los capítulos, el arquitecto estadounidense Mitchell Joachim abordó el tema de la basura desde la perspectiva que ésta ha ido en aumento en las ciudades cuando éstas se convirtieron -a principios del siglo XIX- en el principal escenario de la industrialización, y por ende, atrajeron a miles de personas. Por esta razón y por los efectos actuales de la basura en las ciudades, propuso crear una estrategia sostenible para mejorar la gestión de los residuos y que podrían ser usados en la construcción de nuevos paisajes urbanos que serían parte de las ciudades del futuro.

A continuación podrás conocer su idea.

Las pautas de consumo -sustentadas en la práctica de “usar y tirar”- y la falta de una visión a largo plazo pueden ser considerados dos de los factores que llevaron a las ciudades al problema de la basura que enfrentan día a día. Esto queda demostrado en que el planeta acaba de alcanzar las 400 partes por millón de CO2, niveles de los que claramente no hay que estar orgullosos, porque no se veían hace tres millones de años, según el laboratorio con sede en Hawaii que realizó la medición.

Para tener en cuenta la rapidez con que aumentan los índices de basura en el mundo, Joachim explica que Estados Unidos es el principal generador de basura en el mundo en donde cada ciudadano produce 3/4 de una tonelada de basura en un año. Sólo en Nueva York se producen alrededor de 33.000 toneladas de residuos en un sólo día y con el papel que se gasta cada dos semanas, se podrían llenar el edificio del Empire State.

En China, la urbanización ha ido de la mano del incremento de los residuos, los que aumentan en un 6% por año. En América del Sur, específicamente en Brasil, el panorama tampoco es muy alentador, ya que los vertederos están recibiendo un 10% más de basura por año de las ciudades. Pero India, tiene proyecciones de basura electrónica que dan para pensar y cambiar las conductas, puesto que se estima que los residuos de este tipo, provenientes de celulares, televisores y refrigerados de otros países, subirán en un 500%.

El arquitecto y diseñador urbano también explica que hoy en día los residuos mal gestionados en basurales y vertederos son el principal punto de contaminación de los sectores que están fuera de los límites urbanos.

Con el fin de reducir los porcentajes y mejorar el manejo de las basura en las ciudades, Joachim postula que lo ideal sería enfrentar el problema desde dos perspectivas. La primera se podría dar en los centros de producción y busca que las empresas etiqueten los productos especificando su ciclo de vida. Así, los productos que no tienen la opción de extender su vida útil -o con obsolescencia programada- deberían decirlo y aquellos que sí la tienen, podrían incluir ideas en las que se podrían usar parte de los materiales. De esta forma, las botellas plásticas podrían detallar que se pueden ocupar como accesorios de iluminación y maceteros en las paredes.

La segunda consiste en que las ciudades que tienen plantas de incineración que después usan la basura como energía, como en Suecia, creen programas para que las personas puedan recorrer las plantas y generar conciencia sobre el potencial que tiene la basura, tal como ocurre en el Parque Hiriya, en Israel.

Finalmente, la idea de Joachim propone que cuando se acumule y comprima la basura, ésta se haga en cubos o con otras formas, para que después sirva para construir nuevas estructuras.

Además, el arquitecto cree que los restos de barcos se podrían ocupar en construir zonas de amortiguación en los bordes costeros que tienden a ser afectados por las tormentas.