El ascensor Espíritu Santo volverá a operar en noviembre
Por Hernán Cisternas, El Mercurio. (19/10/13)
Recuperación patrimonial:
Es el primero en ser rehabilitado por el Estado luego de comprar a privados nueve funiculares abandonados.
Con la próxima puesta en funciones del centenario ascensor Espíritu Santo (1911), que dejó de operar hace cuatro años, se inicia en Valparaíso el proceso de reposición de los nueve funiculares adquiridos por el Estado tras el abandono en que quedaron al dejar de ser un negocio rentable para sus propietarios privados.
El ascensor, ubicado a una cuadra de la plaza Victoria, comunica el plan de la ciudad con el cerro Bellavista, donde se ubica el Museo a Cielo Abierto y la casa de Pablo Neruda, La Sebastiana.
La reapertura se realizará a mediados de noviembre, una vez que finalicen los trabajos electromecánicos iniciados en agosto último.
Pedro Pablo Chadwick, jefe del departamento de Bienes Municipales, indicó que luego de un desarme completo de todo el sistema mecánico, se están cambiando cables, ejes, cremalleras, bujes y todo lo que tenga relación con las condiciones de seguridad de este medio patrimonial de transporte, lo que tiene un costo de 50 millones de pesos por unidad.Un trabajo similar se realiza en el ascensor Artillería (1893). En la última semana de noviembre serán intervenidos electromecánicamente los ascensores Larraín (1909) y Concepción (1883), dando paso posteriormente a la restauración mecánica del ascensor Cordillera (1886).
El próximo año volverán a funcionar los cuatro ascensores restantes, entre ellos el Florida y Monjas.
Se está a la espera de que una mesa técnica defina el plan de recuperación integral de los ascensores, que más allá de su funcionamiento incluirá rediseños y obras de arquitectura anexas. Se mejorarían dos ascensores por año, cada uno por dos millones de dólares.