El manifiesto de los ciclistas para una buena convivencia
Piden no olvidar que tanto en un auto como en una bicicleta hay una vida al volante.
Cansados de aparecer ante la opinión pública como personas que solo reclaman, más de veinte agrupaciones de ciclistas y otras que apoyan estilos de vida saludables comenzaron a mediados del año pasado a trabajar en una propuesta que mejore la convivencia en las calles. Así nació “Muévete Santiago”, la propuesta que ellos mismos describen como un nuevo paradigma de movilidad urbana.
Y aunque es la primera vez que un documento sintetiza sus planteamientos, al revisarlo surge inmediatamente la pregunta ¿cómo no se ha hecho esto? Porque es de toda lógica que a los niños se les enseñen en los primeros años de básica las normas de tránsito y que luego se complementen clases teóricas y prácticas para educar en cómo ser un ciclista respetuoso con los peatones.
Estos últimos, dice el documento, deben mantener su preferencia en la vía pública, aunque piden que en la calzada las bicicletas tengan un estatus de vehículos preferentes.
Para que los ciclistas convivan de buena manera con los automóviles, plantean la necesidad de bajar las velocidades máximas urbanas a unos 50 kilómetros por hora.
Y resulta sorprendente que a lo largo de todo el documento los ciclistas consideren necesario explicitar que todo esto se debe a un único fin: el respeto a la vida. Da para pensar.