Primer parque arqueológico de la V Región recupera 508 petroglifos
Tras un año de mejoramientos en el entorno, el mes pasado abrió el parque, donde habitó la cultura aconcagua entre 450 y 1000 a.C.
Por Ximena Bertin, La Tercera
El 3 de octubre, el parque arqueológico Paidahuén, ubicado en la comuna de San Esteban de la V Región, comenzó a recibir a sus primeros visitantes. El lugar, además de su entorno natural, cuenta con una particularidad histórica: ahí se concentran 508 dibujos grabados en las rocas ubicadas en la cima del cerro del mismo nombre.
Son los llamados petroglifos (dibujos en piedra), los cuales pueden ser apreciados por todas las personas que visiten el lugar gracias al mejoramiento del parque, que se ubica en terrenos de la viña San Esteban. De hecho, ese sector está asociado a prácticas rituales de los pueblos originarios y se emplaza en pleno valle de Aconcagua, uno de los que concentran mayor cantidad de petroglifos en el país.
Las figuras de Paidahuén, clasificadas en 22 símbolos diferentes, representan la forma de vida y costumbres de la cultura aconcagua, pueblo que habitó la zona entre los años 450 y 1000 a.C., y que muestran la influencia que los incas imprimieron durante su dominio.
Para el arqueólogo Daniel Pavlovic, quien participó en el proyecto clasificando e interpretando cada una de las figuras, este parque es un espacio privilegiado para apreciar las manifestaciones rupestres de los antepasados. “Ayuda para la creciente valoración y protección del rico patrimonio arqueológico del país y el reforzamiento de nuestra identidad”, explicó.
Diversos estudios han tratado de interpretar el verdadero significado de estos grabados en roca, los cuales confirman que no fueron hechos al azar por sus creadores. Por ejemplo, desde la cima se aprecia que muchos de los dibujos están orientados hacia el norte y que están ubicados en lugares de fácil acceso para los nativos.
Mejoramiento del parque
Mediante un proyecto Capital Semilla de Turismo de Intereses Especiales, con fondos Innova Corfo por $ 40 millones, la viña San Esteban diseñó un proyecto de gestión del lugar para protegerlo. Además se construyeron senderos, hitos, un mirador, anfiteatro, señaléticas y guías capacitados en varios idiomas, además de bibliografía sobre la cultura aconcagua.
“Antes llegaba gente, pero no teníamos las condiciones adecuadas para recibirlos. Ahora tenemos la infraestructura para que lo disfruten tanto investigadores, turistas, como también muchos escolares de la comuna, con los cuales tenemos convenios especiales y que queremos que conozcan este patrimonio que forma parte de la comuna desde hace siglos”, explica María José Irarrázaval, gerente de Turismo de viña San Esteban.
Como parte del proyecto de recuperación, se creó además una agencia turística para promover este atractivo arqueológico, junto a la oferta de turismo enológico y patrimonial que caracteriza al valle de Aconcagua. La idea es potenciar todo la zona de Los Andes usando como gancho los petroglifos, explica Víctor Fuentes, director de Corfo Valparaíso. “Con esto aumentaremos la afluencia de turistas durante todo el año”, puntualiza Fuentes. El parque está abierto de lunes a domingo y la entrada tiene un valor de $ 3.000.