Adiós plintos
Por Claudio Olivares Medina. Editor de ciclismourbano.info @ciclismourbano
Una solución sencilla y barata que dice adiós a una incómoda situación en los rebajes de solera y accesos peatonales a veredas.
La infraestructura para bicicletas comenzó a proliferar hace más de 10 años en las ciudades chilenas. Esto en términos generales es algo bueno. Sin embargo hay falencias importantes en la forma en que han sido emplazadas, diseñadas y construídas. Confío en que llegará el día en que miremos en retrospectiva estos primitivos intentos de infraestructura ciclista y los reconozcamos para no volver a cometer ese tipo de errores.
Uno de los aspectos más molestos de la infraestructura actual en Chile es la ausencia completa de diseño en los cruces. Las ciclovías son vías intermitentes (como una tira de salchichas) que mezclan y comprimen el flujo peatonal con el de bicicletas y en muchos casos presentan irregularidades molestas en la superficie de rodado, ya sea por malas terminaciones en la obra, falta de mantención o inaceptables normas de construcción vigentes.
En este último ítem está el “plinto”, ese desnivel de entre 1 y 5 cm. que genera inconvenientes para el rodado de coches, sillas de ruedas y causa molestias para quienes pedaleamos, resintiendo las ruedas de las bicis, haciendo saltar la carga del canasto o a más de algún pasajero.
Por el tipo de infraestructura que tenemos, los rebajes peatonales terminan operando como puntos de acceso a las ciclovías segregadas que lamentablemente se emplazan en vereda. También esta presente en los llamados accesos vehiculares (acceso de motorizados a casas y predios) los que también se utilizan al ingresar o salir de dichas ciclovías segregadas.
Aquí un par de fotos para dejar más claro el asunto.
La apuesta por la mejora ideal y sustancial de las ciclorutas urbanas (pensadas en el usuario, coherentes, amplias, directas, cómodas y el largo etcétera de recomendaciones) toma tiempo y requiere modificaciones revolucionarias a nuestras políticas y maneras de concebir la ciudad. Pero eso no impide que se aplique creatividad y voluntad para mejorar las condiciones existentes implementando soluciones de bajo costo y de rápida aplicación en favor de una mejor experiencia urbana para pedaleros y caminantes en/con ruedas.
Con esa energía en nuestros pedales es que propusimos al Municipio de Providencia que rellenara estos desniveles utilizando asfalto. Una solución simple, barata y rápida de aplicar para hacer desaparecer esta molestia. Muy apegados a la “norma vigente” los primeros años sólo recibíamos respuestas negativas, pero seguimos insistiendo hasta que la nueva administración municipal, con nueva energía en políticas de acceso y movilidad en bici, dio el vamos para poner a prueba esta propuesta y sacar los aprendizajes necesarios para aplicarla a toda la red ciclista y especialmente la peatonal.
Durante el feriado de las fiestas patrias de Chile (semana del 18 de septiembre) se rellenaron los plintos de 4 cruces en la ciclovía de Av. Antonio Varas: El cruce con Eliodoro Yáñez, Valenzuela Castillo, Pocuro y Bilbao.
El impacto fue notado de inmediato y a través de las redes sociales y correos aparecieron las primeras impresiones. Compartimos aquí algunas:
“Como ciclista urbano y a nombre de todos los que en algún momento tienen alguna discapacidad (sillas de ruedas, personas mayores, coches con guaguas, carros y bolsas del supermercado, entre otras), quisiera por tu intermedio hacer llegar mis sinceras FELICITACIONES a quien propuso y a quien haya ejecutado el relleno que permite suavizar el encuentro entre la calzada de las calles Eliodoro Yañez y Antonio Varas con la Ciclovía de Antonio Varas. Medidas como esta son un acierto y deben replicarse ya que permiten a todos vivir un espacio urbano más amistoso e inclusivo. ” — Juan
“Hola, soy Gaby, usuaria frecuente de la ciclovía de Antonio Varas, quería felicitarles y agradecerles porque realmente es un agrado ahora ocupar esta ciclovía, ojalá tomaran más en cuenta iniciativas así en otros senderos, y comunas.” — Gaby
En conclusión, pensar en el usuario con una cuota de empatía y capacidad de observación de campo, permite la identificación de problemas, la generación de ideas y la posterior propuesta de soluciones sencillas, baratas y de rápida implementación para ir generando cambios positivos en la experiencia urbana y que de a poco vayan ayudando en la concreción de las mejoras sustanciales que permitan alcanzar el cambio de paradigma en el acceso y la movilidad urbana que requieren las ciudades para una mejor calidad de vida.