La Florida inaugura campanario como nuevo símbolo de la comuna
Por Evelyn Briceño, La Tercera.
El hito, construido por la municipalidad, está ubicado en el paradero 14 de Vicuña Mackenna.
Georgina Navarro vive hace más de 40 años en La Florida y ya se prepara para el 21 de diciembre próximo. Ese día se inaugura un nuevo ícono en el paradero 14 de Vicuña Mackenna: un campanario de 14 metros de alto que cada 15 minutos tocará diferentes melodías, desde villancicos hasta cuecas, pasando por el Himno Nacional.
“Ese mismo día quiero venir con mi familia, especialmente con mis nietos, a escuchar la música y ver este monumento que están haciendo. Me parece que es algo hermoso que va en beneficio de la gente”, dice Navarro.
Hace cuatro meses comenzó la construcción de esta estructura metálica, con base de hormigón, recubierta de espuma de aluminio y granito en la parte baja, para limpiar más fácil posibles rayados. En su cima, lleva las 16 campanas de diferente tamaño, cuya combinación de sonidos podrán escuchar los floridanos a un par de cuadras a la redonda.
El lugar era considerado “sucio” y “sin identidad” por el alcalde de la comuna, Rodolfo Carter, y la idea es que el campanario se transforme en el punto de encuentro de los floridanos. “Comenzamos con iniciativas como un skatepark y la pileta, que se inauguraron a mediados de 2012 y ahora se suma esta obra”, dice el edil.
Sir ir más lejos, el alcalde remarca que se trata del punto más importante de la comuna, donde confluyen arterias como Vicuña Mackenna, Américo Vespucio y Walker Matínez, y por donde circulan más de dos millones de personas al día, no sólo floridanos, sino también habitantes de sectores aledaños, como Puente Alto, La Granja, La Pintana y San Joaquín. “Queremos que sea el nuevo símbolo de La Florida, que la gente diga ‘juntémonos en el campanario’”, agrega Carter.
Campanas de bronce
El campanario cuenta con iluminación led (de ahorro energético) y en su punto más alto lleva un reloj. Sus campanas, en tanto, son de bronce y se mandaron a hacer a pedido a una fundición en la ciudad española de Cáceres.
“Estas son fijas y suenan gracias a un computador que las activa y que está programado con más de 100 melodías. Estamos en proceso de sumarle otras más y así poder tocar música de acuerdo a cada efeméride. Por ejemplo, villancicos ahora en diciembre y cuecas en septiembre”, explica el arquitecto encargado de este proyecto, Jaime Scalpello, quien agrega que cada canción dura alrededor de un minuto y medio.
Scalpello señala que hace más de un siglo que no se inauguraba un carillón en la capital. “Campanarios sí se han hecho, pero estos no tienen la capacidad de tocar armonías; sólo son tañidos por alguien para emitir su ‘talán’. Los carillones, en cambio, son casi un instrumento musical, de los cuales hay muy pocos en la capital, como el de la iglesia de La Merced, que no está funcionando”, aclara.
Pablo Altikes, director de Arquitectura de la U. del Desarrollo sede Concepción e investigador de la arquitectura moderna de Santiago, acota que los últimos campanarios inaugurados en la capital están en el Monasterio Benedictino de San Carlos de Apoquindo y en la capilla del Campus San Joaquín de la UC. Este último data de 1997.
Según Altikes, este nuevo carillón en La Florida se transformará en un símbolo si es que tiene espacio urbano y significación dentro de la ciudad. “Ahí donde tienen jerarquía y lugar para ser vistos y escuchados desde lejos, funcionan bien”, acota.
El alcalde Rodolfo Carter agrega que en marzo próximo comenzará la construcción de una cafetería con Wi-Fi gratuito y juegos infantiles para los vecinos a un costado del carillón.
Este fue construido sólo con aportes municipales, los que alcanzaron cerca de $ 140 millones. “Tenemos muchas necesidades, pero queremos darle identidad a nuestra comuna con proyectos como éste. Desde esa perspectiva, este esfuerzo monetario vale la pena”, finaliza el edil.