Tacos, calles cerradas, humo y reparaciones en el centro: el peor momento para turistear en Santiago
Por L. ADRIASOLA y S. SOTTORFF La Tercera
Extendida queja entre extranjeros que visitan el país:
A las clásicas obras que se ejecutan en el verano en la capital se suman los nocivos efectos de los incendios forestales.
¿Y detrás de todo el humo está la cordillera?, preguntaba Pablo Lawler, un turista uruguayo que al mediodía de ayer hacía cumbre en el cerro San Cristóbal para “conocer” Santiago.
Es un decir. La espesa capa de contaminación que aún nublaba el cielo de la capital se lo impidió. Su suegra, una mujer que hace 15 años estuvo en el país, agrega: “Recuerdo que vine un invierno, y todo esto estaba lleno de esmog. Ahora vuelvo con mi familia, y tampoco se puede ver nada. Ya me convencí de que Santiago es así, y seguramente, gracias a las cataratas, mi próxima visita será igual de nublada”, dice Adela Hutín, entre risas.
Una mala impresión que para algunos turistas comienza desde mucho antes. Javier Ovalle acaba de llegar a Chile desde Nueva York. Mientras trataba de abrirse camino en llegadas internacionales del aeropuerto en medio de taxistas, familiares, viajeros y conductores de transfers, el caos le trajo recuerdos de otro lugar: “Es como llegar a Nueva Delhi”.
A mediodía, una decena de turistas intenta fotografiar la Plaza de Armas, el lugar que probablemente ostenta el récord de ser el espacio de la ciudad más frecuentado por los extranjeros. Esta vez el obstáculo no es el humo de los incendios, sino una enorme pared de madera instalada allí, por los arreglos que se están realizando.
“Varios pasajeros me han preguntado dónde está la plaza, estando en la plaza misma. Es que los trabajos no dejan tener una verdadera percepción del lugar. Así que visitar Santiago por estos días es medio aburrido”, cuenta Marco Coloma, guía turístico de la empresa You Tours.
Porque, además de estas obras, quienes se aventuran a recorrer las calles se encontrarán con el cierre de varias de ellas, como Bandera, por la construcción de la Línea 6 del Metro; los desvíos frente a La Moneda, por la restauración de la explanada; la construcción de la plaza frente a los Tribunales de Justicia, los arreglos a la bandera del Bicentenario y, ahora, el humo.
Para esta temporada se proyecta la visita de 876 mil turistas internacionales al país, un aumento de 5% en relación con el año anterior. De ellos, el 65% declara que viene motivado por conocer nuestras bellezas naturales, y el 66% lo hace porque tiene un interés por nuestra cultura.
“Da la sensación de que está todo desordenado, que faltan cosas por terminar. Pero, bueno, nosotros entendemos que es para mejorar la ciudad, aunque no hemos podido visitar todo lo que queríamos”, se lamenta la turista brasileña Odete Guimraess, mientras recorre el cerro San Cristóbal y observa la bruma que cubre a Santiago.
“Tenemos ganas de volver a ver todo lo que nos quedó pendiente en esta visita”, agrega.
”Varios pasajeros me han preguntado dónde es que está la Plaza de Armas, estando en la plaza misma. Es que los trabajos no dejan tener una verdadera percepción del lugar”.
MARCO COLOMA, GUÍA TURÍSTICO