Carta destacada de la semana: Contaminación ambiental
El incendio de Melipilla y el humo que trajo hasta la Región Metripolitana, pusieron en evidencia que normativamente (y también en otros ámbitos) no estamos preparados para enfrentar este tipo de situaciones.
Sobre la norma vigente de calidad del aire y la demora de la autoridad para advertir a la población sobre los riesgos de los contaminantes del aire debido a los incendios, habla esta carta enviada a La Tercera por Marcelo Mena, Director del Centro de Sustentabilidad Unab.
La carta a continuación
Señor director:
El 1 de enero del 2012 entró en vigencia la norma de calidad de aire PM2,5, que regula contaminantes suspendidos de diámetro aerodinámico menor que 2,5 micrones, y que está asociado a enfermedades respiratorias y mortalidad prematura. Y a dos años de su publicación, todavía no se decreta zona saturada a la Región Metropolitana, ni existe plan de descontaminación que explícitamente aborde el contaminante. Por diseño, el Plan de Prevención y Descontaminación Ambiental (PPDA) debía llegar a una concentración anual de 24ug/m3, situación que se cumplió en 2013. Pero el PPDA no está diseñado para cumplir la norma nueva. Esto ha causado una transición incómoda de las autoridades que debían decretar alertas y preemergencias basadas en la normativa más laxa del PM10. Sin embargo, la ausencia de zona saturada o de plan de descontaminación no impide que la población sea informada oportunamente si se registran altos niveles de contaminación.
Cuando llegó el humo de Melipilla, la gente se preguntó si era dañino. La autoridad de salud recién a las 20.00 del domingo advierte a la población de los altos niveles de PM2,5. Esto, luego de que se pasaran casi 24 horas en preemergencia ambiental en forma inédita en zonas como Las Condes y Santiago Centro, adicionalmente a Quilicura y Cerrillos.
En los niveles de preemergencia, la EPA de Estados Unidos hubiera mandado un boletín a los medios de comunicación, colegios y hospitales de que el aire era peligroso, llamando a que la población general no debería hacer ejercicio, con especial cuidado la gente de tercera edad, además de niños. Un boletín que no requiere norma ni ley, sino la simple voluntad de informar.
Marcelo Mena
Director del Centro de Sustentabilidad Unab