Casa Ebel: La casa patrimonial de Puerto Montt que quieren trasladar

Las casas patrimoniales de Puerto Montt que aún se mantienen en pie se construyeron durante las primeras décadas del siglo XX. Una de ellas, la Casa Ebel, se hizo en 1932 en el centro histórico de la ciudad y está reconocida como un Inmueble de Conservación Histórica (I.C.H.), según consta en el Plan Regulador Comunal.

Desde hace un par de días, esta casa se ha visto envuelta en una polémica. Resulta que la familia Ebel, su actual propietaria, la quiere trasladar a otro lugar de la ciudad para que en el terreno actual se construya un supermercado y se pueda mantener la casona. Sin embargo, el director regional del Consejo de la Cultura, Alejandro Bernales, no apoya esta idea porque cree que este hecho sería igual a “borrar la memoria histórica del centro de la ciudad”.

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En el Plan Regulador Comunal de Puerto Montt, la Casa Ebel figura como un Inmueble de Conservación Histórica (I.C.H.) de categoría A1. Esto quiere decir que no se le pueden hacer remodelaciones que alteren su estilo arquitectónico, pero sí trabajos que sean para mantener y proteger su valor patrimonial. Aquí también se fija que la casa se puede reubicar dentro de la ciudad si con esto se asegura que mantendrá su valor arquitectónico, histórico y cultural, decisión que, en este caso, debe autorizar el Seremi del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) de la Región de Los Lagos.

La Casa Ebel se ubica en la calle Balmaceda Nº212, a una cuadra de la Plaza de Armas. Por este motivo, Alejandro Bernales, el director regional del Consejo de la Cultura, cree que mover el edificio no sería lo más adecuado, porque la ciudad ya ha tenido casos similares, como el del Banco Llanquihue que se sacó del centro y se llevó a otro lado, y ya no es tan visitado como en su ubicación original.

Asimismo, hace un balance más general y dice que “Puerto Montt ha tomado la mala costumbre de hacer desaparacer e invisibilizar los edificios que dan cuenta de su historia. Esto es grave”.

La familia Ebel fue la que pidió el traslado al alcalde Gervoy Paredes, a través de una carta, en la que explicaron que asumirán los costos totales del cambio y de la restauración que deberán hacer en la nueva ubicación, además de la Ordenanza de cobros que, según detalla Javiera Torres, directora de la Dirección de Obras Municipales (DOM), equivale al 1% de los derechos municipales por la nueva construcción.

Otro asunto al que se refirió Bernales fue sobre la función del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) que considera que estaría muy centralizado en Santiago. Sin embargo, una de las normas que incluye la reforma a la Ley de Monumentos Nacionales es la creación de consejeros regionales. Eso sí, cabe mencionar que varias organizaciones de expertos en el tema han criticado los cambios que se le quieren hacer a la ley, porque opinan que dejaría “sin vigencia el actual Consejo de Monumentos Nacionales”, tal como explicaron en la carta firmada por el Colegio de Arquitectos, el Instituto de Historia y Patrimonio de la U. de Chile, la Sociedad Chilena de Arqueología, la Sociedad Chilena de Historia y Geografía y la Sociedad de Escritores de Chile y que enviaron a la ministra de Educación, Carolina Schmidt.

Por ahora queda esperar la decisión que tomará la Municipalidad de Puerto Montt.