Más de un tercio de las ventas de viviendas bajo 2 mil UF están ligadas a subsidios fiscales
Por Marco Gutiérrez V., El Mercurio.
Según el Minvu, en 2013 en ese segmento se generaron operaciones con subvenciones por US$ 1.800 millones:
En el gremio de la construcción señalan que solo un tercio de los subsidios se ha pagado desde 2011. En la cartera de Vivienda explican que es el 70%.
Más de un tercio de las transacciones de viviendas bajo las dos mil UF (unos $47 millones) están ligadas a adquisiciones realizadas por personas que obtuvieron un subsidio estatal, y que también ahorraron y consiguieron un crédito hipotecario para alcanzar el monto que les permitió quedarse con una propiedad.
Así lo señaló el subsecretario de Vivienda y Urbanismo, Francisco Irarrázaval, quien explicó que ese mix (subsidio, ahorro y crédito) generó operaciones por cerca de US$ 1.800 millones en el sector inmobiliario en 2013 en el segmento de viviendas bajo las dos mil UF o menos.
El principal subsidio para la adquisición de ese tipo de viviendas es el DS 1, que se compone de dos tipos de subvenciones. Una es el Título I, aplicado a grupos emergentes para la compra o construcción de una residencia de hasta 1.200 UF. El Título II está dirigido a la clase media para compras de hasta dos mil UF.
La materialización o subsidios efectivamente pagados desde la creación de esos beneficios en 2011, tiene diferentes miradas en los sectores público (Minvu) y privado, este último ligado a la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).
Según información de la CChC, sobre la base de datos del propio ministerio, desde 2011 a noviembre de 2013, se otorgaron 73.579 subsidios para grupos emergentes y solo se ha pagado el 29% de ellos. Con relación a la clase media se entregaron 48.963 subvenciones y se materializó el 33%.
El gerente de Estudios de la CChC, Javier Hurtado, comentó que ese porcentaje de pago se podría explicar por una menor oferta de viviendas en segmentos de menor precio, lo que estaría influenciado por el alza de los costos de la construcción, en especial la mano de obra y los precios de los terrenos. Además, indicó que los poseedores de subsidios podrían estar enfrentando problemas para acceder a financiamiento por mayores restricciones bancarias.
Francisco Irarrázaval precisó que los porcentajes que señala la CChC consideran subsidios entregados hace pocos meses y que el análisis sobre el pago real de los subsidios debe realizarse respecto de los documentos otorgados hace 21 o 24 meses. En esos casos, explicó, la materialización es de casi 70% tanto para clase media como para grupos emergentes, destacó el subsecretario. Además, la autoridad dijo que respecto del gobierno anterior, la tasa de pago es mejor.
