Restauración de iglesia de San Pedro parte en abril y se capacitará a mano de obra local
Por Ximena Bertin, La Tercera.
Pese a contar con recursos fiscales aprobados desde 2010, licitación resultó desierta por su alto valor.
Una iniciativa largamente esperada por la comunidad de San Pedro de Atacama, como es la restauración de su templo, por fin tiene fecha. Se esperará que termine Semana Santa, el 21 de abril, para comenzar ese mismo día con el despeje de terreno, colocación de arcos, la fabricación de adobe y la protección del retablo, acciones que darán la partida al proceso de restauración. “De todos los miles de turistas que nos visitan, no hay ninguno que no haya ingresado a la iglesia. Es un ícono de un valor incalculable, tanto para los creyentes como para toda la comunidad, y que necesita con urgencia ser reparada por especialistas”, indica Sandra Berna, alcaldesa de San Pedro de Atacama.
El reforzamiento de los techos de madera de cactus recubiertos de barro y los muros de adobe serán el principal objetivo de este plan, financiado con fondos de gobierno desde el 2010 por $ 549 millones y que sólo hasta ahora podrán ejecutarse.
Hubo que variar la modalidad, ya que varias licitaciones resultaron desiertas, porque el presupuesto de las constructoras triplicaba el disponible, no contando con la capacidad técnica ni experiencia en este tipo de trabajo. Fue finalmente la Fundación Altiplano la que asumió la ejecución del proyecto por su experiencia en la restauración de las iglesias de Arica. La meta es que pueda resistir otros 100 años más, enfrentando el paso de los años, los sismos y la lluvias y humedad del invierno boliviano. “Esta iglesia tiene problemas serios de falta de mantención. En ese aspecto, la intervención que haremos tiene un sentido de rescate patrimonial, pero también de mucha responsabilidad con las normas antisísmicas que garanticen su continuidad y seguridad”, explicó Angel Guillén, arquitecto peruano de vasta experiencia en la restauración de las iglesias del valle del Colca en Arequipa y director del Taller de Arquitectura y Patrimonio de la Fundación Altiplano.
La misión de la Fundación fue tomar lo mejor del proyecto original y actualizarlo según su modelo de gestión que conserva las técnicas ancestrales. “El proyecto original decía que había que reforzar con mallas de acero y poner cemento, y nosotros no trabajamos con eso. Lo sometimos a la opinión de expertos a nivel mundial en refuerzo de adobe y usaremos métodos ya probados, pero no tan invasivas para estos edificios”, reiteró Heinsen. “También vamos a restaurar la cubierta de madera de chañar y cactus, que es preciosa, en vez de hacer una doble cubierta como se planteaba en el proyecto original”, aclara Heinsen. En San Pedro, al igual que en Arica, se integrará a los vecinos como maestros restauradores, capacitándolos en las técnicas originarias de construcción, junto a estrategias de reforzamiento y de mantención para prevenir daños. “Esperamos que muchas personas del pueblo puedan participar y aportar también su experiencia con los elementos y técnicas de construcción local”, opina Robert Maizares, arquitecto y habitante de San Pedro.
La fundación ya entregó un primer informe de la actualización del proyecto al Consejo de Monumentos para incluir las observaciones esta semana, y continúa con el proceso de captación de los vecinos que participarán en la restauración en la modalidad escuela-taller. “Queremos profesionalizar el trabajo de los maestros para que puedan ellos mismo mantener su iglesia en el futuro y no depender de la fundación”, puntualiza Benjamín García, constructor civil a cargo del proyecto.
Durante las obras, que se extenderán por un año, se harán los ajustes para mantener la iglesia abierta parcialmente a feligreses y turistas. “Sábado y domingo se harán las misas, y durante la semana se sectorizarán los trabajos para que la gente pueda visitarla”, señaló el párroco Gilberto Cardona. Como parte del proyecto, también se restaurará el órgano de la iglesia, modelo colonial del cual existen sólo tres en el país, además de las policromías, el retablo del altar mayor y algunas imágenes.