“La agenda urbana requiere fortalecerse para combatir en serio la desigualdad”
Por Manuel Valencia, El Mercurio. (12/04/14)
Alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá:
La edil expuso en el VII Foro Urbano Mundial en Medellín. En su exposición se refirió al “momento decisivo” que, a su juicio, vive Chile en materia de ciudades.
Carolina Tohá, alcaldesa de Santiago, fue una de las oradoras más aplaudidas del VII Foro Mundial de Urbanismo, que organiza la ONU en Medellín, Colombia. En un panel junto a representantes del Banco Mundial, la U. de Londres, la U. de Columbia y la Corte Suprema de Malawi, narró el “momento decisivo” que, a su juicio, vive Chile en materia de legislación e institucionalidad urbana.
Su tesis es que para atacar los problemas de las ciudades se requieren gobiernos metropolitanos con mayores recursos y atribuciones.
-¿Confía en que el nuevo Consejo Nacional de Desarrollo Urbano genere ese cambio?
“Debe ser así. Hay que enfrentar intereses muy fuertes que han impedido mirar la ciudad transversalmente. En materia urbana nos hemos quedado muy atrás, hemos perdido oportunidades y tenemos rezagos inexcusables. Creo que el consejo propuesto tiene personas con gran visión. Hay que ponerle energía política para salir del paradigma en que la ciudad depende del cálculo de rentabilidad de los negocios privados”.
-¿Hay espacio para generar esa energía política si la prioridad del Gobierno está en otras áreas, como educación?
“El país ha puesto la desigualdad en el centro de su agenda y el actual gobierno impulsa reformas en esa dirección. Pero un país con un 87% de urbanización no puede enfrentar la desigualdad sin políticas urbanas que se hagan cargo de ella. Gran parte de la manifestación cotidiana de la desigualdad tiene que ver con una experiencia urbana de los chilenos. La agenda urbana requiere fortalecerse si queremos combatir en serio la desigualdad”.
-¿Cómo busca generar ese cambio a nivel de su comuna?
“Queremos cambiar el paradigma de movilidad, con mayor prioridad al transporte público y seguridad a peatones y ciclistas. Otro tema es hacer posible la vivienda social en el centro de la ciudad. Hace pocas semanas, Santiago inauguró su primer condominio social desde 1998. En él intervinieron tres administraciones municipales, el municipio aportó el terreno y complementó el subsidio. Las familias hicieron un aporte extra, pues los fondos de los subsidios no dan para construir en Santiago. Esto queremos extenderlo, pero requiere que los programas de vivienda incluyan el precio el suelo como algo separado”.
-¿Que se hará por recuperar espacios públicos hoy perdidos en Santiago?
“Cuando dejamos el espacio público abandonado y permitimos que se ensucie, raye y sea invadido por la informalidad, se deterioran sitios que generan una identidad transversal. Entonces, la gente se refugia en un espacio privado, donde la desigualdad campea. Por eso es importante que la Alameda sea digna, que los parques sean seguros, que uno pueda caminar por la calle y se sienta mejor que en un mall . Son los únicos espacios que son de todos, donde el bolsillo no es lo que manda, sino la experiencia de ser ciudadano. La gran antítesis de la desigualdad urbana es la calidad del espacio público”.
Premio por plan chileno en Haití
La creación de la primera política habitacional de Haití, ideada con la cooperación del gobierno chileno, recibió el premio del Institute for Housing and Urban Development Studies (IHS) de la Universidad de Erasmo y la ONU-Hábitat, en el foro urbano de Medellín.
“Esto nació de la destrucción en Haití y ahora se ha transformado en un proceso de reconstrucción”, dijo el representante haitiano, Harry Adam. El plan permitirá a familias damnificadas contar con un sitio propio y construir casetas sanitarias que podrán ir transformando en viviendas.
“Nos tiene muy contentos que hay dos instituciones que están con mucho interés de replicar el modelo de este proyecto piloto en Haití, de modo que empezamos a trabajar en nuestro objetivo de fondo que es transformar este plan piloto en un programa permanente”, dijo el ex jefe de Política Habitacional del Ministerio de Vivienda chileno, Guillermo Rolando, quien apoyó la iniciativa.