Robo de agua entre Coquimbo y el Biobío ya equivale al consumo de más de 200 mil casas
Por Marco Gutiérrez V., El Mercurio.
Las sanitarias Aguas del Valle, Esval, Aguas Andinas y Essbio cuentan cómo enfrentan esta situación:
Compañías afirman que ilícitos se observan en clientes comerciales, industriales y residenciales de todos los estratos. Intervenciones de medidores y conexiones directas a la red son algunos de los mecanismos para hurtar.
Empresas del sector sanitario, energético y telecomunicaciones están preocupadas por los robos que sufren los servicios que prestan, los cuales han mostrado alzas en los últimos años.
En la industria sanitaria, los hurtos de agua que se producen entre las regiones de Coquimbo y el Biobío -incluida la Metropolitana- equivalen al consumo de casi 203.500 viviendas. Esto, de acuerdo a lo informado por las principales empresas sanitarias del país que, a la vez, operan en esas zonas que suman en conjunto cerca del 77% de la población en el país.
Aguas Andinas, que atiende la Región Metropolitana, señaló que al año detectan cerca de cuatro mil casos de uso irregular del servicio de agua potable y alcantarillado en inmuebles comerciales, industriales y residenciales de barrios de altos y bajos ingresos. La firma indicó que los robos equivalen al consumo promedio de 70 mil hogares en un mes (considerando unos 20 metros cúbicos por vivienda).
La empresa detecta las irregularidades con fiscalizaciones a propiedades que presentan un consumo errático respecto de sus propias características o demanda histórica. Los robos se efectúan principalmente alterando o interviniendo medidores o realizando un bypass en el arranque. Aguas Andinas advirtió que ese delito tiene consecuencias económicas para los clientes, pues deben pagar lo adeudado y costear el reemplazo del medidor dañado. A la vez, la compañía podría iniciar acciones judiciales. También señaló que quienes ofrecen conexiones fraudulentas son bandas delictivas, por lo cual quienes los contratan se exponen a ser atacados.
Zona Centro Sur
Essbio, que atiende a las regiones de O’Higgins, el Maule y Biobío, sufre al año hurtos de agua por unos 10 millones de m {+3} , volumen que equivale al consumo de 59.523 viviendas en igual periodo, según datos de una presentación de la consultora Alto. En 2013, registró un alza de 42% en ilícitos detectados.
Los problemas que se producen por esa situación en la zona de operación de Essbio son disminución de presión en la distribución de agua, grifos inoperativos, contaminación del agua y mala calidad de servicio que afecta, por ejemplo, al encendido de los calefones.
El gerente general de Essbio, Eduardo Abuauad, comentó que “trabajamos con gente especializada y utilizamos tecnologías como el georradar para hacer estas detecciones sin romper los pavimentos o veredas. Paralelamente, generamos una alianza estratégica con la empresa Alto, con el objetivo de descubrir las irregularidades”.
Para Essbio, la región del Biobío es la que presenta mayor cantidad de ilícitos, principalmente concentrados en Chillán y Talcahuano.
En 2013, el robo de agua en Coquimbo -donde opera Aguas del Valle- ascendió a 2,5 millones de m {+3} , equivalente a 14 mil viviendas. En Valparaíso -bajo la administración de Esval- llegó a 11 millones de m {+3} , semejante a la demanda de 60 mil hogares. El total de ilícitos en ambas zonas creció 28% anual en 2013.
Cristián Vergara, gerente de Clientes de Esval -que tiene como filial a Aguas del Valle- comentó que entre los problemas que generan los robos, en el caso de edificios, está el aumento en las cuentas del condominio, situación que afecta el prorrateo.
Para evitar esas situaciones, añadió Vergara, han elevado las medidas de seguridad antihurto en los medidores, además de reforzar las inspecciones.
La lucha de VTR y Metrogas
En los sectores de telecomunicaciones y de abastecimiento de gas también acusan hurtos. En la cableoperadora VTR afirmaron que luchan permanentemente contra “la piratería y el fraude”. Explicaron que “cuando una persona se cuelga ilegalmente a la red de su vecino, afecta la calidad del servicio de televisión, de telefonía y de internet de ese hogar, que paga mes a mes su cuenta”.
Desde VTR sostuvieron que el fraude no tiene que ver con el nivel social de quienes tienen conexiones ilegales. “Incluso en sectores de altos ingresos hemos detectado domicilios colgados”, afirmaron.
En Metrogas indicaron que los casos que han enfrentado son intervenciones de medidores y conexiones ilícitas. Las denuncias que se han realizado son 350 casos entre el 2011 y 2013.
La compañía comentó que es riesgoso intervenir cualquier instalación a gas, ya que se está manipulando un combustible y se pone en peligro la integridad de quien lo está realizando como la de la comunidad cercana.
Metrogas dijo que realiza inspecciones periódicas en terreno para enfrentar este problema.
Chilectra: pérdidas representan consumo anual de una ciudad de 200 mil habitantes
Chilectra distribuye energía en 33 comunas de la Región Metropolitana y cuenta con casi 1,7 millones de clientes. El año pasado, sufrió pérdidas de energía por hurto que alcanzaron los 135 GWh, que representa el consumo anual de una ciudad de 200 mil habitantes, indicaron fuentes de la compañía.
En la firma añadieron que en los últimos tres años ha detectado, en promedio, 35 mil hurtos.
Estos ilícitos generan problemas en la red e inestabilidad del sistema, produciendo cortes de suministro en las zonas, riesgos eléctricos a las personas y a las viviendas, que muchas veces pueden ser mortales, señaló la empresa.
Paras evitar los robos, Chilectra ha realizado desarrollos tecnológicos para dificultar la intervención de los equipos de medición. A la vez, en algunas zonas mantiene monitoreo de consumos y realiza inspecciones diarias ante sospechas de hurto. Algunos procedimientos los realiza junto a Carabineros, los cuales muchas veces terminan en juicios e, incluso, cárcel para el infractor, añadió la firma.