En septiembre parte vía controlada de taxis en el aeropuerto de Santiago
Por Pamela Gutiérrez, El Mercurio.
Se inicia con una “marcha blanca” y se busca despejar la llegada al terminal aéreo:
Los choferes deberán esperar a los usuarios en un estacionamiento especial hasta que los llame un coordinador.
“¿Taxi?” ¿Necesita taxi? ¿Taxi? ¿Taxi?”, es todo lo que oye el pasajero recién llegado al aeropuerto de Santiago, cuando trata de abrirse paso entre decenas de transportistas que ofrecen sus servicios a viva voz.
Una bienvenida que no pocos usuarios han criticado por las molestias y el acoso del que son objeto. Este asedio debiera comenzar a terminarse en septiembre con la marcha blanca del proyecto de vía controlada para taxis que busca despejar el primer nivel del recinto.
La idea es que los conductores no estén apiñados en el sector de llegadas, sino que esperen su turno en un nuevo aparcadero de 274 cupos, divididos para vehículos reservados y sin reserva. Los conductores, además, contarán con un área de descanso.
El sistema de taxis será operado por la empresa Maxximiza, la misma que hoy está a cargo de los estacionamientos del recinto.
Cuando el pasajero llegue al aeropuerto, en áreas visibles del recinto se encontrará con información, en inglés y español, sobre la operación de los taxis y que incluirá los valores recomendados para los recorridos más frecuentes. No será una tarifa fija, pero sí el pasajero tendrá una idea de cuánto vale un trayecto, para evitar que le cobren de más.
Junto a la información visual, la empresa dispondrá de un staff de asistentes que colaborarán con el pasajero para conseguir transporte.
Así, un coordinador llamará a un conductor para que se aproxime al sector de llegadas, a través de una pista exclusiva, cuando su usuario ya está designado.
Como uno de los reclamos más frecuentes es, precisamente, que no hay cómo sancionar a un taxista que haya ofrecido un mal servicio, como el sobreprecio de un recorrido, el pasajero tendrá un boleto que indicará la patente del auto que lo transportará.
De este modo, con ese ticket en la mano, el usuario podrá reclamar a la empresa y el taxista afectado no podrá seguir ofreciendo sus servicios en el aeropuerto.
Al respecto, el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, comentó que este proyecto “nos va a permitir ordenar el sistema de taxis en el aeropuerto para dar un mejor servicio a quienes lo requieran, por lo que debemos ofrecer condiciones adecuadas para los pasajeros que necesiten desplazarse en taxis”.
En otros países
Aeropuerto de Vancouver (Canadá)
Un asistente ayuda al usuario a escoger el vehículo. Se entregan rangos de precios, como por ejemplo desde el recinto aéreo al centro de la ciudad.
Aeropuerto de Barajas (España)
El vehículo de alquiler funciona con taxímetro, pero hay tarifas fijas, como desde el aeropuerto al centro, de 30 euros.
Aeropuerto de Schiphol (Holanda)
La reserva de los taxis se puede hacer desde la página web del aeropuerto, que incluye una tarifa del trayecto.
Aeropuerto JFK (EE.UU.)
Hay un coordinador y existen rangos de precios según el lugar de destino.