Vivienda prepara plan para reducir sitios eriazos en ciudades del país
Por Manuel Valencia, El Mercurio.
Se utilizarán medidas de reforma tributaria:
Además de nuevo impuesto a la plusvalía que captan los terrenos, se analiza plan para redefinir propiedad en los suelos.
Un informe elaborado por el Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales (IEUT) de la Universidad Católica identificó 4.323 sitios eriazos en el Gran Santiago que, en total, alcanzan una superficie de 6.500 hectáreas. De ellos, el 90% está en zonas donde es factible construir con alta densidad, que se concentran en comunas como Lo Barnechea, Pudahuel y San Bernardo.
La gran cantidad de terrenos desperdiciada es crítica, considerando que la ciudad cuenta con pocos espacios disponibles para construir nuevas viviendas en zonas con buenos servicios de transporte, salud, educación y comercios.
“Muchos terrenos permanecen años en ese estado a la espera de condiciones mejores, mientras su propietario no hace esfuerzos por ese lugar y capta la plusvalía de las inversiones de sus vecinos o las obras que genera el Estado en su entorno. Son, además, foco de basura, no aportan a la ciudad y sirven para actividades que poco aportan, como estacionamientos”, explica el jefe de la División de Desarrollo Urbano del Minvu, Pablo Contrucci
Para eliminar los actuales incentivos que los generan, según los análisis del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), esta cartera está analizando distintas medidas.
Según Contrucci, una medida inmediata la traerá la reforma tributaria, con la introducción de impuestos a la plusvalía que absorben los terrenos. “La captación del valor de los terrenos, que es un mecanismo que funciona en todo el mundo, va a corregir mucho de esto, porque no va a ser barato tener un terreno que capte la plusvalía. Con esto, se aplicará un impuesto a la diferencia entre el costo de origen del terreno menos el precio de venta”, señala.
Otra idea que analiza el Gobierno, a través del Consejo Nacional de Desarrollo Urbano, es implementar un modelo de redistribución de propiedad de terrenos que funciona en España. Esta modalidad, denominada “mecanismo de repartición de cargas y beneficios”, reconfigura la propiedad de todos los terrenos en una zona que el Estado busque fomentar. Así -explica Contrucci- los propietarios participan con un porcentaje de propiedad, según la superficie del suelo y la edificación que tiene. Los eriazos pierden participación, con lo que se crea un desincentivo a tener suelos vagos.