Segundo colapso de Metro en una semana afecta a 400 mil personas en hora punta

Por F. Fuentes, M. Valencia y P. Reed, El Mercurio.

Baja de energía dejó sin servicio por dos horas a la Línea 5, la más extensa del tren urbano:

Falla -ocurrida a las 19:30- dejó al descubierto falta de información a pasajeros y un plan de contingencia tardío.

A solo una semana de la mayor suspensión en la historia de Metro, que dejó la Línea 4 inactiva por 16 horas, el servicio volvió a experimentar un corte crítico. Esta vez, el colapso se desató a las 19:30 -en hora punta tarde- en la Línea 5, la más extensa (con 30 kilómetros) y que sirve a comunas populosas de la capital, como Maipú, Pudahuel, Ñuñoa y La Florida.

La crisis afectó a 400 mil pasajeros (contando los usuarios de distintas líneas impactadas); entre ellos, 50 mil que fueron evacuados desde los 14 trenes que circulaban por la red (15 mil) y de los andenes en túneles y viaductos (35 mil).

Tras el desperfecto, originado en el mismo edificio de Metro (en Alameda con Lord Cochrane), una sensación de caos y desinformación vivieron quienes pretendieron acceder a estaciones de alto tráfico, como Baquedano. Cientos de personas se enteraron en el lugar de la falla y preguntaron a la prensa lo que ocurría. No había ningún tipo de aviso ni personal en la superficie. La escena se repitió una y otra vez: la sorpresa, seguida de la interrogante sobre cómo volver a casa. Una joven que tenía que ir a Maipú constataba que las micros venían llenas.

Recién a las 20:44, una pareja de carabineros se instaló por el acceso de Vicuña Mackenna para explicar a la gente que podía tomar la Línea 1 por el acceso que da al teatro de la Universidad de Chile.

A las 21:00 horas, desde una patrulla de Carabineros se informó por altavoces que el servicio se restablecería en 20 minutos. “Hubo mucha desinformación”, reconoció el mayor Eduardo Yuseff, quien dio el aviso. Minutos más tarde llegó al lugar el general director de Carabineros, Gustavo González Jure, quien bajó a la estación.

También hubo críticas a la información entregada durante la evacuación. Una mujer dijo que tras los avisos habituales cuando hay demoras, de pronto quedaron atrapados antes de llegar a Baquedano. “Esto fue un engaño. Quedamos parados como animales, más de media hora encerrados, sin luz. Al final salimos solos”.

Estas situaciones, sumadas a las que vivieron los usuarios del servicio la semana pasada, generaron molestia en La Moneda, por la inseguridad a la que se vieron expuestos los pasajeros y la tardanza de las vocerías para responder por la crisis.

Cerca de las 21:00 horas, el ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo, salió a dar explicaciones y lamentó las molestias que vivieron los usuarios. Dijo que instruyó una investigación especial “para revisar los programas de mantenimiento del Metro y responsabilidades que correspondan”.

El presidente del directorio de Metro, Aldo González, afirmó que “falló el sistema de alimentación eléctrica. Los sistemas de protección automática se activaron y eso paraliza la energía. Estamos investigando el origen. Al parecer no es algo trivial”.

Para mitigar los efectos de la crisis, Transportes dispuso 300 buses para reforzar los viajes del Transantiago que cubren el mismo trayecto de la línea 5. El servicio fue repuesto a las 21:30.

SUMINISTRO

Desde abril de este año, la empresa EnorChile, ligada al empresario Carlos Cardoen, abastece a Metro de energía eléctrica.