Esmog: balance 2014 arroja dos preemergencias no declaradas
Por Karen González T., La Tercera.
Contaminación en Santiago aumentó en relación al año pasado. Intendencia evalúa formas para decretar alertas por PM 2,5.
Los altos niveles de contaminación en Santiago registrados durante este invierno ha sido un tema de preocupación constante entre las autoridades. De hecho, los episodios críticos de esmog superaron a los experimentados en la capital en 2013, tanto por material particulado grueso (PM 10) y, principalmente, por material particulado fino (PM 2,5).
Así, en el primer caso se pasó de cinco alertas constatadas, a nueve durante este año, y de cero preemergencias en 2013 a tres en este curso. De estas últimas, sólo en una fue decretada por la autoridad, ya que fue detectada con anterioridad y se establecieron medidas para bajar los niveles.
Sobre este punto, el jefe de Calidad del Aire del Ministerio de Medio Ambiente, Sebastián Tolvett, explica que esto se debe a que “el modelo de predicción tiene un porcentaje de acierto y los niveles de preemergencia constatados no fueron muy altos y estuvieron muy cerca del rango de alerta”, afirma.
Sin embargo, aún más críticos fueron los niveles de contaminación por PM 2,5, la polución más dañina, pero del cual aún no existe un plan para enfrentarlo. De esta se registraron niveles de alerta en 31 ocasiones, de preemergencia en 14, y de emergencia en tres oportunidades, frente a las 14 alertas y cero preemergencias de 2013 (ver infografía).
A juicio de Tolvett, las razones de este crecimiento de la contaminación se deben a “mejores condiciones meteorológicas y de ventilación que el año pasado, una mayor precisión en la medición de PM 2,5 y también porque la cantidad de emisiones han aumentado en los últimos años”.
Medidas para PM 2,5
El enfoque de alertas preventivas para episodios de PM 10, utilizado por la Intendencia Metropolitana, podría ser implementado el próximo año también para establecer medidas en niveles altos de PM 2,5.
Como explica el intendente Claudio Orrego, “pediremos al Ministerio de Medio Ambiente que nos den herramientas para la gestión de episodios críticos por 2,5, ya sea incorporándolos en el plan de descontaminación para PM 10 o usando la misma figura de las ciudades del sur, a través del decreto de alerta sanitaria”. Esto, considerando que el plan de descontaminación de Santiago por material particulado fino anunciado por el gobierno se implementaría en 2016.
Por eso se estudian medidas como aumentar la restricción a catalíticos y a vehículos diésel, la prohibición de leña residencial en la zona urbana y la incorporación de inspectores municipales en la fiscalización.
Según las estimaciones de la autoridad regional, los episodios de contaminación aumentarían en más del doble. “No es que el aire va a empeorar el próximo año, sino que el estándar va a ser más exigente”, agrega.
El experto en contaminación de la Usach, Patricio Pérez, opina que “es correcto que se apliquen más medidas, porque este año se constataron pocos episodios por PM 10, mientras que los de 2,5 fueron cerca de 50. Habrá que decretar muchas veces más episodios, pero es lo correcto de hacer”.