MOP prepara plan de inversión hídrico que incluye desaladoras en diversas ciudades
Por Marco Gutiérrez V., El Mercurio.
Programa también consideraría obras ligadas a nuevos embalses o intervenciones en los que ya existen:
Las iniciativas apuntan a abordar el consumo humano, la demanda agrícola y de sectores productivos.
Hasta ahora en Chile la mayoría de las desaladoras que están operando son iniciativas privadas ligadas al abastecimiento de agua para la minería. Pero esta situación podría cambiar, ampliándose su uso en el consumo humano y agregándose a la agricultura.
El ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, adelantó ayer que en los próximos días se anunciará un “plan hídrico completo que va a incorporar la inversión de desaladoras”.
La autoridad recordó que en Antofagasta, una parte importante de la ciudad se abastece de la producción de una planta desaladora y que “es necesario hacerlo también en Copiapó, para lo cual hay un proceso en marcha para abastecer a la ciudad”. Este último proyecto está siendo impulsado por la sanitaria Aguas Chañar.
Undurraga afirmó que “esas dos experiencias, la que ya funciona en Antofagasta y la que está en curso en Copiapó, nos han animado y hecho tomar la decisión de tener un plan más abierto de otro conjunto de desaladoras en distintos lugares del país y no solo para el consumo humano, si no también para el riego y otros usos productivos”.
El titular del MOP declinó comentar detalles del programa de inversión hídrica y se limitó a señalar que “lo daremos a conocer en el transcurso de las próximas semanas”.
El plan del MOP también incluiría pequeños embalses o intervenciones en los actuales para aprovechar de mejor forma la distribución del agua.
El director general de Aguas (DGA), Carlos Estévez, comentó que las situaciones más críticas en materia de escasez hídrica se concentran desde la Región Metropolitana hacia el norte del país.
“En la Región Metropolitana este es el peor quinquenio en materia de escasez hídrica en los últimos 100 años”, afirmó Estévez.
El DGA señaló que el gobierno está preocupado del impacto que está generando la sequía y afirmó que en materia de desaladoras se ha analizado el caso de Almería en España.
Uso minero
Entre 2011 y 2013, el consumo de agua en la minería de cobre subió 81%, pasando de 713 litros por segundo de agua de mar -considerando agua desalada como salada- a 1.287 lit/seg en ese lapso, de acuerdo con datos de Cochilco publicados por “El Mercurio” en septiembre pasado. Hoy están en operación seis plantas desaladoras -ligadas a la minería- y cuatro sistemas de impulsión de agua de mar.
En el norte del país existen varias iniciativas privadas ligadas a la minería para levantar desaladoras. Una de ellas es la que impulsa Minera Escondida de BHP por US$ 3.430 millones.
En marzo de este año, la sanitaria Esval afirmó que en sus planes, y ante la persistencia de la sequía, analizaba la opción de construir desaladoras en Valparaíso y Coquimbo. Según sus datos, la construcción de una desaladora promedio sería de US$ 10 millones y lo más costoso sería la operación por el uso de energía.
Antofagasta
La planta de esta ciudad entrega 600 litros por segundo para abastecer 60% del consumo de local.