Pdte. Aso. Empresarios Nocturnos, Turismo y Espectáculos: “Santiago ya es fome de noche y Providencia lo iba a dejar más fome”
Por Sergio Rodríguez, La Tercera.
El abogado que lideró las protestas contra la restricción horaria para el alcohol dice que “la moral no se controla por reloj”.
Acelerado, canchero, con inspiración de trasnoche y un cigarro ad eternum en la mano. El prejuicio indica que el presidente de la Asociación Nacional de Empresarios Nocturnos, Turismo y Espectáculos de Chile (Anetur) podría tener ese tipo de características. Fernando Bórquez (43), sin embargo, titular de la entidad desde hace ocho años, no comulga con estereotipos y se ríe de las caricaturas. “No fumo ni tomo. Nadie que trabaje en la noche, y que le vaya bien, lo hace. Sí soy amigo de la buena mesa, mi deporte favorito”, bromea, tras algunos segundos de seriedad.
Son días de celebración para este abogado y administrador público, soltero, residente de Vitacura y dueño de varias firmas, entre ellas una de guardias de seguridad. Bórquez, consejero nacional del PPD y tres veces candidato al sillón edilicio de Vitacura, ha sido el hombre fuerte tras las protestas frente a la nueva norma horaria para alcohol que se intentó aplicar en Providencia, cuyo objetivo era que restaurantes, discos y otros establecimientos cerraran más temprano. La misma ordenanza que este martes, de aprobarse el nuevo acuerdo, retrocedería varios pasos y volvería a un sistema similar al anterior (ver recuadro).
“Santiago ya es fome de noche, muere muy temprano, y Providencia lo iba a dejar más fome, con la idea que allí se estaba ejecutando. Los turistas y gente de negocios no tienen una oferta diversificada en la capital para ese horario. A la 1.00 casi no hay restaurantes abiertos. Las discos funcionan los fines de semana y no tenemos un casino en Santiago. Hay mucho potencial y voluntad de trabajo, pero la ordenanza municipal causó un daño enorme”.
¿En qué sentido?
La gente dejó de ir en septiembre, casi en forma inmediata, cuando se anunció la norma. Desde ese minuto, el municipio le causó un daño irrecuperable a muchos establecimientos, porque los clientes no van a ir ahora el doble porque dejaron de concurrir dos meses. Hubo despidos y trabajos que sencillamente se perdieron.
Usted sigue molesto…
Es que todas las batallas de la Anetur tienen que ver con la libertad de las personas. Lo hicimos por los cigarros y por la Tolerancia Cero Alcohol, que son medidas descabelladas. No por lo que buscan, sino por la forma. Me molesta que nos traten como niños, que se instale en el discurso que la noche es mala, que es para los viciosos, que la gente buena se acuesta temprano. Todos los excesos y delitos están regulados por ley y fiscalizados por la policía. No necesitamos más cortapisas. La moral no se controla por reloj. ¿Cuál es, entonces, la hora correcta para vivir?
Pero la genesis de la norma en Providencia era vecinal.
No me compro eso. Yo creo que surgió como una inquietud de la alcaldesa y de algunos concejales. Además, a diferencia de lo que se ha dicho, los locatarios de Manuel Montt, Bellavista y Providenvia sí fueron a los cabildos y a muchas reuniones, como consta en las actas, y el tema no se discutió en esas instancias. Tampoco fue una norma que se analizara durante un año, lo que sinceramente sería peor. Creo que se hizo a la rápida y mal, sin entender cómo funciona la vida de la comuna. Allí se moviliza una población flotante de 1,5 millones de personas que trabajan, pasean, se divierten y viven. Y este error arrastró a los teatros, a los taxis, a los parquímetros, a muchas actividades anexas.
Usted parece tener una mala opinión de la alcaldesa Errázuriz?
No, es una buena persona, simpática, cuyo mérito es haberle ganado a (Cristián) Labbé. Creo que hizo esta norma inspirada en buenas intenciones, pero se equivocó. Quiso llenarse a aplausos y terminó con pifias y críticas. Finalmente, logramos un entendimiento.
Pero ustedes, en las protestas, la compararon con Pinochet…
A ella le dolió esa ironía, que surgió de algunos de nuestros miembros que estaban desesperados. Debe entender que nadie reclama una injusticia o un despropósito lanzando pétalos de rozas. La comparación tenía que ver con que nos sentíamos en un toque de queda.
Usted es PPD. ¿Cómo fue su relación el con ex alcalde Labbé?
Para este tipo de temas, no tuvimos problemas con él. Creo que los militares no son conservadores en cuanto a temas como la vida nocturna. En eso, hemos tenido algunas disputas con otros alcaldes de derecha, como Raúl Torrealba (Vitacura), Francisco de la Maza (Las Condes) y Pedro Sabat (Ñuñoa), pero jamás me imaginé que viviríamos esta situación con una alcaldesa que se plantea progresista.
Más allá del acuerdo que se ha logrado en los horarios y días de cierre, ¿cuál sería su ideal?
Para mí, las siete de la mañana, como se hace en otros países, muchos de ellos europeos. A esa hora ya hay luz diurna y transporte público en forma regular. La salida sería más segura y sin causar ruido en la calle a los barrios más residenciales. Hoy, en plena noche, de Bellavista se moviliza un núcleo de 20 mil personas, que a esa hora no tiene comodidades para irse a su casa. En otros países los horarios hasta el amanecer funcionan bien e incluso se les dan incentivos a locales con buen comportamiento.
Los nuevos horarios que se votarán el martes
Uno de los puntos más discutidos por Fernando Bórquez es que el horario para alcoholes vigente “se diseñó como una tabla rasa, sin considerar las diferencias y necesidades entre los distintos locales, y los ritmos del público chileno. En esta época, por ejemplo, los restaurantes reciben más tarde a los clientes y tienen una necesidad real, en términos del servicio que prestan, de atender hasta otro horario”.
Según la normativa vigente, los cabarets deben cerrar, de lunes a domingo, a las 2.00. Las discotecas lo hacen a las 2.00, salvo sábados y festivos (3.00). Los restaurantes atienden hasta las 2.00, también de lunes a domingo. Y las botillerías deben cerrar a las 23.00 (en los barrios de Manuel Montt, eje Providencia, Santa Isabel y Tobalaba). En Bellavista bajan la cortina a las 22.00.
Con la nueva propuesta, que será votada este martes por el concejo municipal de Providencia, el mapa quedaría así: botillerías hasta las 23.00 de lunes a jueves, y hasta las 0.00 los viernes, sábado y víspera de festivos. Restaurantes, hasta las 2.00 de domingo a martes, miércoles hasta las 3.00 y hasta las 4.00 los jueves, viernes, sábado y festivos. Los cabarets ubicados en el eje Providencia cerrarán a las 4.00, y hasta las 5.00 los viernes, sábado y festivos.
Las discotecas, en tanto, se regirán por la ley de alcoholes. Es decir, de lunes a jueves hasta las 4.00, y viernes y sábado a las 5.00.