Polémica en Arica genera ubicación del nuevo Museo Chinchorro
Por Mario Rojas Martínez, El Mercurio.
El recinto fue incluido en el plan de desarrollo de zonas extremas:
Tiene las momias más antiguas del mundo, pero hoy solo se exhibe 1,25% de su colección. Proyecto cuesta $25.997 millones.
El Museo Arqueológico de San Miguel de Azapa, ubicado en el km 11 de ese valle de Arica del mismo nombre, tiene 80 mil piezas que incluyen momias con una data superior a siete mil años, las más antiguas del mundo. Sin embargo, solo exhibe mil, el 1,25% de la colección.
El recinto es administrado por la Universidad de Tarapacá (UTA), desde donde se sostiene que el inmueble les “quedó chico”. Por ello, el Gobierno Regional de Arica incluyó en el plan de zonas extremas el proyecto de construir el nuevo “Museo Cultura Chinchorro”.
La inversión es de $25.997 millones. De ellos, $997 millones serán para el diseño, en el que se trabajará los próximos dos años.
En 2017 se realizará una licitación internacional y su adjudicación. El inicio de las obras está programado para 2018, con una duración de más de dos años.
Para ello se destinarán los $25 mil millones restantes.
La iniciativa está en su fase de anteproyecto, pero la UTA tiene adelantos.
El complejo tendría 20.400 m {+2} construidos, con áreas de exposición (38%), conservación (26%), investigación (13%) y educación (10%). Asimismo, incluye espacios para negocios y la administración.
“Es mucho más que la Cultura Chinchorro. Habrá textilería, arte rupestre, historia colonial de una zona de asentamiento de afrodescendientes”, aclara Jorge Bernal, director de planificación y desarrollo de la UTA.
La universidad también quiere mantener su actual ubicación en la parcela N° 27 del valle de Azapa. “No vamos a imponerlo, pero en la ex Maestranza o en la costa del radio urbano de Arica hay temas como la contaminación y la erosión”, dice Bernal.
Mientras tanto, los principales gremios productivos de Arica apoyan la iniciativa, pero exigen una consulta ciudadana, que los incluya, para definir la locación. “Debe ser un ícono en el radio urbano, conectado con el centro, el puerto y los turistas que arriben en cruceros”, plantea Ayú San Martín, presidente de la Cámara de Turismo.
También algunos cuestionan los US$ 2 millones anuales que costará la mantención, monto proyectado por la UTA. “Es poco lógico”, dice Valentín Cubillos, presidente local de la Cámara Chilena de la Construcción.