Crece tendencia a reducir el uso de bolsas plásticas en el comercio de ciudades del sur
Con una ordenanza, Concepción se sumó a una decena de comunas que ya aplican esta medida:
En Pucón, Futaleufú y Coyhaique ya no se entregan en supermercados y tiendas, y en otras localidades hay restricciones que las limitan a tres o cinco por cliente.
Ya sea porque lo impone una ordenanza o en forma voluntaria, la restricción a la entrega de bolsas plásticas en el comercio de comunas del sur está cobrando cada vez más fuerza. Hace unos días, la comuna de Concepción, con más de 200 mil habitantes, se sumó a esta tendencia ya visible en una decena de ciudades más pequeñas y turísticas, como Pucón, Futaleufú y Coyhaique, donde estos artículos ya no están disponibles en supermercados y tiendas.
Esta medida va en la línea de políticas que aplican países de la Unión Europea, en que a través de una nueva ley optarán entre reducir el uso de las bolsas de un grosor menor de 50 micras u obligar a que los clientes paguen por ellas. Se busca que a 2020 no se utilicen más de noventa por persona al año, y que a 2026 sean cuarenta como máximo.
En Concepción, el plan es que en un año más el comercio entregue solo tres bolsas por cliente y para ello se desplegará una campaña para acostumbrar al público.
En Pucón, ese trabajo ya se hizo. Pequeños y grandes comerciantes apoyaron la ordenanza desde un inicio, y opera de buena fe, porque incumplir la medida no tiene multas. Los clientes ya no las echan de menos y esperan que los turistas tampoco lo hagan.
“Hace rato que se viene trabajando para que esta sea una ciudad ecológica y la comunidad lo entiende así”, dice Gabriela Vilches, vecina puconina. En este balneario desde enero a julio pasado se dieron un máximo de tres bolsas por comprador, y en el segundo semestre se bajó a una. Desde el 1 de diciembre dejaron de repartirse y el público o reutiliza las de plástico que conserva o usa otras de género y arpillera.
En Futaleufú ocurre lo mismo desde marzo último, y previo a ello se repartieron bolsas biodegradables, una labor que también se hace en Chaitén y Palena, porque la meta es convertir a la provincia de Palena en zona libre de uso de plástico en el comercio. Aquí no hay ordenanzas sino que los propios habitantes se impusieron este desafío.
Coyhaique, en tanto, optó por un decreto alcaldicio para que a contar del 1 de noviembre último se eliminara la entrega de estos artículos.
Siguen los pasos de las pioneras comunas como Puerto Varas, donde desde octubre el comercio solo da tres bolsas. En marzo, se reducirá a dos; en julio, a una, y desde septiembre de 2015 a ninguna. “No me ha costado nada acostumbrarme y es como a la antigua, como cuando una iba con mallas”, dice Érica Chiguay, vecina de esa zona.
En Futrono, a mediados del próximo año, supermercados y tiendas podrán repartir un máximo de cinco, según lo impone una ordenanza. Y en Panguipulli, la intención era llegar al 1 de abril próximo sin bolsas plásticas en el comercio -hoy se dan tres-, y quien incumpliera pagaría 5 UTM, pero un dictamen de Contraloría estimó que estas normas con multas carecen de fundamento legal. El municipio ahora ofrece distinguir con un sello verde a quienes se sumen a la medida.
La Contraloría General de la República revisó los casos de Puerto Natales, Torres del Paine, Pucón, Puerto Williams y Punta Arenas, a petición de dos fabricantes de bolsas plásticas, y expone que una ordenanza no puede prohibir el derecho a desarrollar una actividad económica.
En Punta Arenas, donde la medida se ha difundido todo el año y entrará en vigor el 23 de enero, cuestionan el dictamen. “Acá se habla de sustituir y es necesario”, expone el abogado del municipio Rodrigo Henríquez, quien explica que el constante viento arrastra las bolsas plásticas a sectores periféricos, afectando el ambiente.
PATAGONIA
Un proyecto de ley intenta eliminar el uso de bolsas en Aysén, Magallanes y Palena.