Valdivia proyecta nuevo centro cívico y puerto en Corral para dar el salto como capital regional

Por Manuel Valencia, El Mercurio.

La principal ciudad de Los Ríos enfrenta el dilema de crecer, pero con poco suelo urbano disponible:

La urbe sufre los efectos de concentrar población con un déficit de infraestructura.

Un pequeño temblor en el tradicional café Haussmann de Valdivia hace vibrar levemente los jarros cerveceros de vidrio. Ese pequeño movimiento, según uno de los dependientes del local, basta para remecer algo más profundo, que se refleja en algunas miradas de profundo temor, que casi traen consigo los locales: un miedo ancestral a los movimientos sísmicos, procedente del mayor terremoto y maremoto de la historia, que asoló la ciudad hacia 1960. Desde entonces, cuentan quienes lo vivieron, nada fue igual en Valdivia. El río cambió de forma, el centro debió ser reconstruido y el puerto de Corral se convirtió en escombros y en una promesa de retorno que nunca se cumplió.

A más de medio siglo del cataclismo, Valdivia, hoy convertida en capital de la Región de Los Ríos, busca sacudirse de sus miedos para consolidarse como una ciudad de futuro. El alcalde Omar Sabat lo ejemplifica en proyectos como el recambio de luminarias sustentables, los taxis solares, el nuevo Teatro del Río, o esa aura de “Boston del sur” que ha adquirido con la llegada creciente de estudiantes -muchos, trotadores frecuentes de la costanera o parroquianos del barrio Esmeralda- a sus diversas universidades. “Buscamos ser una ciudad sustentable, distinta y consolidar a Valdivia como un centro de innovación”, dice el jefe comunal.

Esa aspiración convive con proyectos que persiguen consolidar un salto entre una capital de Provincia a una que lleva siete años encabezando una nueva región. Así, por ejemplo, se alista el proyecto de un nuevo centro cívico a un costado del puente Pedro de Valdivia y a unas 10 cuadras del centro comercial, cruzado por la calle Picarte. Los medios de comunicación locales dan cuenta del debate que enciende este cambio: los comerciantes temen una debacle comercial por el traslado masivo de valdivianos que podría producir el proyecto a otro sector de la ciudad. “Hay que ver qué pasa. Nosotros lo vemos como una oportunidad para poder potenciar otro sector”, agrega.

Otro tema recurrente es la conectividad. Los tres accesos no están en buen estado (uno es reparado) y el aeropuerto se cierra frecuentemente por neblina.

Felipe Spoerer, presidente regional de la Cámara Chilena de la Construcción, dice que el gran proyecto para la ciudad es un puerto fluvial, por el cual se podría generar un corredor para sacar carga que viene de Argentina por Puyehue. “El río es el gran activo y distintivo de Valdivia”, afirma.