Contraloría ordena derribar rejas perimetrales de las torres Carlos Antúnez
Por B. Blanco y M. J. Jarpa, La Tercera.
Ente fiscalizador obliga a la Municipalidad de Providencia a retirar dos estructuras ubicadas en un espacio de uso público.
El eventual derribo de unas rejas situadas en los alrededores de las torres de Carlos Antúnez, mantiene a los vecinos de este conjunto habitacional en alerta. Se trata de dos estructuras metálicas que, según argumentan los residentes, les otorga “una sensación de seguridad”.
La primera de ellas, de 90 metros de largo, fue levantada hace unos diez años en Av. Carlos Antúnez con calle Dr. Héctor Ducci, y la segunda, de 60 metros, fue instalada hace dos en un tramo de la calle Luis Middleton, al llegar a Av. Antonio Varas (ver infografía). Sin embargo, la Contraloría General de la República, en un decreto emitido el 30 de diciembre de 2014, ordenó derribar ambas rejas a la brevedad.
La razón, de acuerdo al ente fiscalizador, es que la estructura metálica “se emplaza sobre un bien nacional de uso público, sin contar con las correspondientes autorizaciones”. El decreto agrega que “corresponde que la Municipalidad de Providencia adopte las medidas tendientes a lograr el complimiento de la orden de demolición (…) para cuyo efecto deberá recurrir a todos los medios que le concede la ley”.
Este no es el primer documento que emana la Contraloría sobre el tema. En diciembre de 2009 también ordenó retirar la reja, pero la anterior administración no la ejecutó.
“Como municipio estamos preocupados por esta situación y entendemos las inquietudes de los vecinos y, en el evento en que lo requieran (…) el municipio acogerá las solicitudes de mediación vecinal”, comentó el subdirector Jurídico de la Municipalidad de Providencia, Gonzalo Neira.
Controversia y mejoras
Estas estructuras no son las únicas del lugar. De hecho, el complejo, levantado en 1968, está rodeado en un 80% de rejas, según explica la presidenta de la junta de vecinos 3A Plaza Jacarandá, Mariana Ariztía. “Que nos boten una reja es el principio del fin de todo. La razón para ponerlas fue que aquí se escondían ladrones, vendedores de drogas. Era el hotel y el comedor de Providencia”, describe Ariztía.
Agrega que el espacio cerrado, “es de los propietarios, no es un bien nacional de uso público” y que tomarán acciones judiciales para evitar el retiro.
Raymundo Escobar, quien reside desde 1984 en el complejo, sostiene que “cuando pusieron la reja estaba en contra, pero por la seguridad de los niños, lo acepté. Cada propietario tuvo que pagar a la administración del recinto para instalarla”.
En una carta remitida a los vecinos de la Unidad Vecinal Providencia, la municipalidad detalló una serie de medidas para atenuar los impactos que tendría el retiro de las rejas, que si bien ya están proyectadas, ahora se tornan más necesarias.
La propuesta, que se enmarcan en Plan de Desarrollo Comunal 2013-2021, impulsado por la alcaldía, contempla el mejoramiento de los jardines interiores del recinto habitacional -a partir de febrero de este año- y el reforzamiento estructural de los estacionamientos subterráneos ubicados en la salida de calle Luis Middleton, medida que comenzó a ejecutarse este mes.
También se plantea el mejoramiento de Luis Middleton para transformarlo en un paseo y también la mejoría de los espacios públicos que rodean la Plaza Juan XXIII. La primera etapa de implementación de este proyecto contará con un presupuesto de $200 millones.