Polémica demolición de la Facultad de Química y Farmacéutica de la U. de Chile
Gran polémica se ha generado en los últimos días, al conocerse el plan de la Universidad de Chile para demoler la casona que desde 1925 fue ocupada por la Escuela de Química y desde 1945 por la Facultad de Química y Farmacéuticas de la Universidad de Chile.
La casona de Vicuña Mackenna 20, construida en el siglo XIX con el fin de ser una destilería, será reemplazada por un edificio de 8 pisos y 5 subterráneos, donde funcionará el Instituto de Estudios Internacionales, el Instituto de Asuntos Públicos y Centro de Extensión Artística y Cultural (CEAC), de la universidad.
Las obras comenzarían en septiembre, por lo que esta semana comenzó la desmantelación de la casona.
Ante esta situación, ya son varias las personas y organizaciones que han reclamado por la demolición de una construcción que, aunque no está protegida legalmente como patrimonio, es considerada por muchos como tal.
Hoy en una entrevista en La Segunda, la presidenta del Comité de Patrimonio del Colegio de Arquitectos, Ana Cárdenas, dijo que “es chocante ver que en la U. de Chile no son capaces de proteger este patrimonio” y que “hay una falta de conciencia”.
El escritor Hernán Castellano Girón quien estudió, se tituló en esa escuela y luego se convirtió en profesor de esa institución, dijo que “tiene que haber un modo de detener este acto criminal, y solicitar que el edificio de Vicuña Mackenna 20 sea declarado Monumento Nacional”.
El “Laboratorio Patrimonio Activo de la Universidad de Chile” y ex alumnos, académicos, funcionarios y profesores de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad, también han rechazado la demolición lanzando una campaña para reclamar que la casona sea reconocida como Monumento Histórico.
Una vez más nos vemos enfrentados a una situación de este tipo, donde la legalidad (el no reconocimiento patrimonial del inmueble) se ve contrastado con el sentimiento ciudadano.