Santiago, Providencia y Las Condes agrupan a más de un cuarto de los inmigrantes en Chile
Por L. Adriasola, S. Salazar y F. Bittner, El Mercurio.
De los 155.164 foráneos asentados en el país, el 26% reside en esas comunas:
Según explica Rodrigo Sandoval, jefe del Departamento de Extranjería del Ministerio del Interior, lo anterior obedecería a un factor socioeconómico, más que a un fenómeno migratorio.
Por la crisis económica que vivían en España y por las oportunidades laborales que se les abrieron en Chile, la publicista barcelonesa Eva Valent y su novio, Alberto Puy -quien se desarrolla como ingeniero de caminos en Metro-, llegaron a Chile el 28 de marzo pasado.
Luego de un par de semanas viviendo en un hotel, decidieron armar su hogar en Providencia, comuna que, según cuenta Valent, se asemeja a su natal Barcelona. “Nos sentimos cómodos aquí, es como estar en mi ciudad, porque el centro me agobia y hay mucha gente. Nos gusta la tranquilidad y por eso elegimos quedarnos acá. Además, hay muchos bares y buenas zonas de ocio. A mi pololo le recomendaron vivir aquí”, cuenta la joven, quien a tres meses de arribar al país encontró trabajo en una agencia de modas.
Ellos no son una excepción. Según datos del Departamento de Extranjería de la Policía de Investigaciones, de los 94.341 extranjeros que registraron visas en la Región Metropolitana el año pasado, 1.061 de ellos fueron españoles que se instalaron a vivir en Providencia.
Al analizar el total de asentamientos -el año pasado se registraron 155.164, un 3% más que en 2013- se puede observar que el 61% elige vivir en la Región Metropolitana, es decir, 94.341 personas. De ellas, 24.685 se instalaron en la comuna de Santiago, 9.242 en Las Condes y 6.506 en Providencia, siendo estas tres comunas las que agrupan más de un cuarto -exactamente el 26%- de los foráneos que llegan al país (ver infografía).
Al desglosar sus nacionalidades, se puede advertir que en Santiago los peruanos lideran el ranking de asentamientos y también los colombianos. En menor medida aparecen los españoles y dominicanos. En tanto, en Las Condes y Providencia comienzan a aparecer argentinos, estadounidenses y también españoles. En estas comunas se nota una disminución en el asentamiento de colombianos o peruanos, como sí se pueden ver en Santiago.
Este fenómeno, según explica el jefe del Departamento de Extranjería, Rodrigo Sandoval, se puede entender por la “característica geográfica” de la capital, más que por los flujos migratorios.
“Lo que uno debería concluir es que más que la nacionalidad, lo que determina la ubicación geográfica de las personas es su nivel socioeconómico, principalmente determinado por la profesión, pero también determinado por las distintas capacidades de emprendimiento, lo que les hace tener situaciones más acomodadas”, señala Sandoval.
Lo anterior se podría explicar porque, según datos del Instituto Católico Chileno de Migración, los españoles y argentinos que han arribado al país en los últimos años vienen con una profesión, siendo los españoles quienes aportan características más de ingenierías duras, mientras que los trasandinos, de comercio más blando. Otras nacionalidades, en tanto, tienen especialidades técnicas o de servicio doméstico. Características que, entonces, podrían explicar, según Sandoval, la composición geográfica que tienen dentro de la capital.
Mónica Rall, ciudadana argentina que llegó a vivir a Chile junto a su familia en 2010, puede ser un ejemplo de ello, pues al llegar -a su marido lo trasladaron para desempeñarse como ingeniero en sistemas en el país- contrataron un servicio de “localización”, que los llevó por varios sectores. Finalmente eligieron San Carlos de Apoquindo, por su proximidad con colegios, supermercados y clínicas.
“Sacamos la Tarjeta Vecino de la comuna, hemos ido a talleres, espectáculos y no nos han discriminado por ser de Argentina. Por el momento estamos bien, las chicas de adaptaron súper bien. Acá todos los amigos de mi hija viven cerca, vienen mucho para acá. Por el momento estamos todos tranquilos y bien”, cuenta Rall.
Para integrar de igual forma a los extranjeros, comunas como Santiago y Providencia han impulsado programas desde una visión de derechos e inclusión.
Providencia, por ejemplo, cuenta con el Departamento de Diversidad y No Discriminación, donde no solamente se preocupan de velar por los derechos de los inmigrantes, sino que también gestionan la regularización de sus documentos y promueven actividades formativas sociales y culturales.
Desde 2013, Santiago tiene una Oficina de Migrantes, que acoge a los extranjeros más vulnerables para que logren una inserción en armonía y con buena convivencia. El año pasado, además, se esforzaron en regularizar la situación de los niños que estudian en la comuna.
Desde Las Condes comentan que los extranjeros han logrado fusionarse con la población de la comuna y que tienen los mismos derechos a la hora de acceder a los beneficios que ofrece el municipio.
“Más que la nacionalidad, lo que determina la ubicación geográfica de las personas es su nivel socioeconómico”.
RODRIGO SANDOVAL
JEFE DEL DEPARTAMENTO DE EXTRANJERÍA DEL INTERIOR
“El perfil de los extranjeros que viven en Santiago es más variado, por ello viven en un lugar con buena conectividad”.
IDENILSO BARTOLOTTO
VICEPRESIDENTE EJECUTIVO DE INCAMI