Taltal es azotado por tres aludes tras el colapso de las piscinas aluvionales
Por Carlos Santana, El Mercurio.
Más de tres mil damnificados en la zona:
Barro y escombros anegaron casas en el sector norte del puerto. Alcalde pide maquinaria y equipos para atender emergencia.
“Estamos aislados. Taltal se dividió por la mitad, y la ayuda aún no llega”, dijo Edith López, mientras trataba de salvar parte de los pocos bienes que quedaron en su casa luego que el barro entrara de golpe en la madrugada del jueves.
Su casa está ubicada en una de las esquinas de la calle Zañartu, la vía por donde irrumpió el primer alud.
El panorama se replica en las otras dos primeras calles de la entrada norte de Taltal: Progreso y Bilbao. Al interior de los hogares el fango alcanza más de 50 centímetros de altura, y la mayoría de las familias afectadas en dicha zona se quedaron con lo puesto.
Pero se resisten a abandonar sus casas por temor a los saqueos. Por eso, hasta anoche, en los tres albergues de la localidad había apenas 13 personas, mientras que el resto de la población damnificada (unas tres mil personas) permanecía en la vía pública cuidando sus propiedades.
“Llevamos tres días sin dormir y con muy poca comida. No sabemos cuándo podremos sacar todo el barro y recuperar nuestras cosas”, aseguró Eusebio Lillo, uno de los pobladores de la calle Bilbao, ubicada cerca de las piscinas aluvionales, que debían contener un alud en caso de lluvias intensas.
En enero de 2014, en la Quebrada de Taltal se construyeron cuatro piscinas decantadoras y cuatro barreras de contención con capacidad de retención de 115.000 m {+3} de material de arrastre.
Sin embargo, nada fue así: el agua, el barro y las rocas arrasaron con todo lo que encontraron a su paso.
Las cinco piscinas aluvionales no resistieron el intenso temporal y colapsaron en la madrugada del jueves, lo que provocó tres aludes sucesivos en un lapso de 18 horas.
“En el sector norte hay 2.500 personas afectadas y en el sur cerca de 500”, dijo el alcalde de Taltal, Sergio Orellana.
Pidió maquinaria pesada y equipos “para remover las montañas de escombros y dar una solución a las familias, que están desesperadas”.
“Rescatamos a dos menores que eran arrastrados por el barro y ayudamos a evacuar a las personas”, señaló el teniente de Bomberos Andrés Ocampo. Otros voluntarios de ciudades vecinas acudían anoche para apoyar.
ACCESO
La Ruta 5 Norte está cortada. El ingreso a la ciudad solo es posible por la vía costera.